El portero Liborio Vicente Sánchez Ledezma es mexicano, tiene 34 años de edad, mide 1.83 centímetros y defiende el arco del Municipal Grecia. En conversación con DIARIO EXTRA nos habló de su carrera y a la vez justificó que Grecia no va a descender.
¿Cuál ha sido su recorrido en el fútbol?
– Me tocó debutar en Chivas, donde estuve ocho años, me tocaron torneos con Tapatío y una Copa Libertadores. Posteriormente me voy a Veracruz al ascenso con una final y en Querétaro salvamos al equipo del descenso y llegamos a la semifinal. Me voy a Campeche, a la Primera A, después a Toluca, donde nos toca jugar una Copa Libertadores. En selecciones, desde la Sub 17 hasta la Selección Mayor con una Copa América. Venimos de jugar cinco años en Guatemala y también estuvimos en Colombia. Todo es aprendizaje.
¿Qué tal esta oportunidad en Costa Rica?
– Me gusta, siempre lo he dicho. El fútbol no tiene idiomas y uno tiene que divertirse. Yo me divierto en la cancha y trato de bajarle esa intensidad que a veces los compañeros tienen y, obviamente, les doy la confianza atrás. Agradecido con el cuerpo técnico que dio el sí para que llegara y sobre todo con la directiva que me trajo.
¿Cómo ve lo que se le viene a Grecia con el fantasma del descenso encima?
– Perdón por lo que voy a decir, pero esto es a base de huevos y uno debe tener fe y buenos compañeros en el vestidor. Es una familia lo que se forma aquí. Los malos momentos se sacan con trabajo y tranquilidad. Creo que se están haciendo bien las cosas, Manrique (el técnico) está trabajando bien y a nosotros nos toca rompernos el alma en cada partido.
¿En partidos como ante Alajuela también valen otros recursos? ¿Vio que se metieron con usted desde la grada?
– Todo cuenta y la verdad es que yo me divierto. Si tengo que ganar algunos minutos cuando voy ganando, sinceramente, lo voy a hacer porque es tiempo para mis compañeros y tiempo a nuestro favor. Es mi forma de jugar.
¿Tenía un partido aparte con el camerino de la Liga?
– Sí, pero esto es fútbol y todo queda dentro de la cancha y si no, no pasa nada. Yo vivo los partidos al filo, como persona y jugador me he divertido y no por nada llevo 19 años de carrera.
¿Cómo ve la cantidad de mexicanos en nuestro país, tanto con jugadores como técnicos?
– Bien porque ellos están abriendo camino, a como me tocó a mí abrir camino en Colombia o en Guatemala. Han hecho bien las cosas los entrenadores y los jugadores. Hay que aprovecharlo, uno debe demostrar, como persona y como jugador, por qué le están dando la oportunidad al mexicano, pero por sobre todo respetar las trayectorias y los equipos a los que uno se enfrenta en Costa Rica.
¿Se les da más valor aquí?
– Qué te puedo decir, si nos abren las puertas aquí es igual que le abran las puertas al extranjero en México. Hay que aprovechar esas oportunidades, darle gracias a Dios y aprender de todo. La vida es para aprender y es como el fútbol, ser mejores personas.
¿Qué le parece el ritmo de juego que tenemos en Costa Rica y los tiempos de reposición que se están dando?
– Estos 10 minutos que dieron ahorita fueron como otro tiempo. Uno cuando está que te traen encima te cuesta eso. Pero el fútbol de Costa Rica está creciendo, creo que tiene buen nivel de roce y de jugadores que si te confías te pueden sorprender como pasó con el empate (de Joel Campbell). Vengo a aportar en lo que pueda mi granito de arena. Lo principal es ayudar a mis compañeros y a los que vienen de abajo darles la mano y que sientan el apoyo de la gente grande.
¿Van obligados al juego contra Pérez Zeledón en casa por estar ellos también en zona de descenso?
– Uno trabaja para no cometer errores y yo como portero trabajo y me visualizo en lo que va a pasar en el partido. No esperaba un centro así y que entrara el jugador de la Liga solo. Son circunstancias que a veces te van a pasar y debes estar los 90 minutos concentrados.