• 24 años de trayectoria como artista
Ronald Díaz, liberiano de nacimiento conocido en el ambiente artístico como Rodicab, es un amante de las pinturas acrílicas preocupado por el rescate de las tradiciones guanacastecas, y quien ha tenido formación autodidacta.
Además, destaca por ser uno de los pocos creadores guanacastecos de cómics, y es pionero de las novelas gráficas en Costa Rica con “Desafíos”, de la que él piensa en hacer un remake ya que está agotada y muchos de sus seguidores le consultan por ella, pero no la puede vender porque no tiene más copias.
Los cómics, también conocidos como historietas, son relatos explicados mediante viñetas o recuadros que contienen imágenes, que en ocasiones cuentan con poco texto, porque narran una historia a través de secuencias. El subgénero de la novela gráfica pretende tocar temas más profundos, no solo de entretenimiento.
A pesar de que Rodicab lleva 24 años dedicándose a esta profesión nunca ha recibido ningún reconocimiento o premio tras haber participado en diversas exposiciones y galerías de arte, pero eso no lo desalienta, por lo que no piensa en dejar a un lado su pasión.
“En realidad todavía no he ganado ningún premio ni reconocimiento por todo el aporte que he estado haciendo todos estos años a la cultura. Pero eso no me quita el sueño. Lo importante es seguir trabajando y seguir aportando”, externó.
Este pintor e ilustrador también es dueño de Rodicab Arte, la marca del artista nacional con la que se ha dado la tarea de brindar un aporte en el rescate de la herencia cultural plasmando su estilo y, si usted desea adquirir sus obras, están disponibles en la Librería Internacional.
Los principales cómics que el costarricense ha elaborado son “Las leyendas sabaneras”, “El dueño del monte” y “La leyenda del Rincón de la Vieja”. Muchos niños leen este estilo de cómics, por lo que les resulta más fácil aprender debido a la gran cantidad de ilustraciones que traen las novelas gráficas.
A continuación, más declaraciones que Díaz dio a DIARIO EXTRA durante una entrevista sobre su labor artística.
¿Qué lo motivó a dedicarse a este
trabajo?
– Lo que me motivó fue darme cuenta de la necesidad que había de hacer aportes para que niños y jóvenes aprendan y conozcan de nuestra cultura. Y me di cuenta de que podía realizar obras más llamativas y atractivas para captar el interés de los niños y jóvenes. Una forma diferente y más llamativa para enseñar.
¿Por qué trabaja específicamente con las leyendas guanacastecas?
– Descubrí en las leyendas toda una fuente riquísima de historias, ideales para adaptar a la novela gráfica. Y leyendas de Guanacaste específicamente, porque soy guanacasteco, y nosotros los guanacastecos somos muy orgullosos de todas nuestras costumbres y tradiciones.
¿Cómo lo ha hecho sentir esta pasión y cómo piensa que instruye a los demás a través de ella?
– Me hace sentir muy satisfecho la labor que he desarrollado, porque sé que estoy haciendo algo positivo con las leyendas y las tradiciones en general. (…) Yo he dado charlas en colegios y escuelas y siempre recibo excelentes comentarios de la labor que he hecho y de mis obras, entonces me siento contento porque, por lo menos, aunque sea a pequeña escala, mis obras están siendo útiles y están teniendo un impacto positivo.
¿De dónde sale el nombre de Rodicab?
– Siempre me llamaron la atención los artistas que usaban seudónimos. Entonces, a la hora de iniciar mi carrera artística, decidí buscarme también un seudónimo y Rodicab fue el nombre de uno de los primeros personajes que inventé, pero que deseché. Sin embargo, el nombre sí me gustó y decidí usarlo como seudónimo. Es la unión de mi nombre y apellidos: Ro de Ronald, di de Díaz y cab de Cabrera.
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