Washington, (EFE) – Ashlyn Julian, una bebé de cuatro semanas de nacida, sufrió una aneurisma en el cerebro, por lo cual la llevaron de emergencia al Hospital de la Universidad de Kansas, en Kansas City, Estados Unidos, donde tras varios análisis los cirujanos optaron por aplicarle pegamento para salvarle la vida. Actualmente se recupera satisfactoriamente.
\”Ashlyn está en muy buena condición. En realidad tuvo dos derrames, y aunque quedaron suturados, lleva un tiempo para que el cuerpo reabsorba la sangre. Evoluciona bien\”, dijo la portavoz del centro médico, Jill Chadwick.
La niña nació sin complicaciones el 16 de mayo y fue trasladada a su casa en Olathe, pero en las semanas siguientes sufrió vómitos. Una vez en el Hospital Mercy su madre Gina dijo que en una imagen por resonancia magnética se localizó un aneurisma del tamaño de una aceituna.
Los aneurismas cerebrales son extremadamente raros en los menores porque típicamente demoran años en desarrollarse y debido a ello ni siquiera hay instrumentos pediátricos para el procedimiento.
Koji Ebersole, cirujano, explicó que el pegamento -cianoacrilato – \”es el mismo compuesto que puede comprarse en cualquier tienda, pero para uso quirúrgico se esteriliza. El cemento ya se usó anteriormente en operaciones, pero es la primera vez que da el caso en una bebé.
Los cirujanos insertaron un micro catéter en un vaso sanguíneo en la cadera derecha de Ashlyn y lo llevaron por las vías sanguíneas al cuello.
Con la ayuda de una avanzada máquina de imágenes, Ebersole y su equipo movieron el aparato a través del cerebro hasta aproximarlo al aneurisma mismo. Allí depositaron el pegamento. El compuesto se secó y creó un soporte interno.
En los próximos días la niña heroína irá al centro médico de Mercy donde la observarán y luego podrá regresar a casa.