Es uno de los mejores recuerdos de su carrera.
Era el 1º de julio del año 2011, Copa América, y en el estadio Mario Alberto Kempes, de Córdoba, se medían Argentina y Costa Rica. En la formación estelar de ese choque estuvo el defensor José Salvatierra, quien conversó con DIARIO EXTRA sobre aquella oportunidad que tuvo cuando era muy joven.
¿Qué recuerda de ese juego?
– Éramos una selección Sub23 y llevábamos a tres jugadores mayores de 23.
¿Cómo tomaron medirse a Messi?
– Estábamos bastante emocionados. Obviamente que la figura más destacable era Messi, pero también estaban Agüero, Di María, Higuaín, Zanetti, Tévez, Lavezzi. Enfrentábamos a una selección con jugadores élite y en Argentina, así que el ambiente en el estadio sería de esos momentos únicos.
¿Qué tan difícil fue frenar a Messi?
– Lo que se ve en los partidos, lo que fue él en el Barcelona y lo que es hoy, es lo que vivimos. Un jugador que sabe regatear muy bien, que siempre quiere encarar y aunque uno lo bajaba con falta se levantaba y seguía jugando. No reprochaba ni se enojaba. Uno trataba de hacer el trabajo, pero esos jugadores se salen del molde. Es totalmente diferente.
¿Al jugar comentó algo?
– Cuando le hacía alguna falta o chocaba con él se levantaba, seguía jugando y luchando por la pelota. Era mucho de lo que se jugaba en el partido ya que ellos habían empatado con Colombia y con Bolivia, nosotros le habíamos ganado a Bolivia, entonces se definía el segundo lugar del grupo. Llegaron con toda la seriedad por lo que se estaban jugando.
¿Les dijeron que no pidieran autógrafos?
– No, nos dijeron nada. La Volpe (DT de la Sele) habló con nosotros en el camerino y nos hizo ver que íbamos a enfrentar a jugadores de élite, pero que no lo viéramos así, que viéramos que era un sistema contra otro,11 contra 11. Éramos jóvenes y teníamos una ilusión bonita de avanzar. En el fútbol hay oportunidades únicas y así lo veíamos, para poder avanzar y trascender. Al final claramente terminan pesando tantas figuras y el hecho de que no se les puede regalar una porque no te perdonan.
¿Alguien se dejó la camiseta de Messi?
– Creo que sí, pero no lo recuerdo bien. Ellos se portaron superbién, supertuanis con nosotros. Ahí en el túnel algunos intercambiaron camiseta, pero la verdad no recuerdo quién logró tomar la de Messi.
¿Usted se dejó un recuerdo?
– No, estaba buscando a Zanetti ya que es mi ídolo desde pequeño y no logré encontrarlo en el túnel. Era con el único que tenía interés de intercambiar la camiseta.
¿Qué significó jugar al lado de su ídolo?
– Mucho porque siempre lo vi desde pequeño en el Inter y Argentina, además de su carrera, lo que logró y poder enfrentarlo, estar ahí disfrutando en la cancha fue un sueño hecho realidad. Me sentí con ganas de dar más. Me pasó cuando apenas venía llegando a la Selección. Tenía entre 20 y 21 años.
¿La Volpe les pidió algo específico sobre Lio Messi?
– Nosotros teníamos una idea de juego con La Volpe y simplemente reforzamos la idea de juego, el sistema. Claro que cuando enfrentas a un jugador así hay que tomar las precauciones, pero nunca pidió que se dobleteara, solo que se le tuviera cerca, que no se le dejara tomar mucho impulso con el balón porque cuando él va en carrera con el balón es difícil controlarlo o bajarlo. Fue a lo que estuvimos atentos. Por ahí logramos controlarlo un poco, pero llegaron algunos descuidos y los goles.
¿Qué significa saber que usted lo enfrentó?
– Es de lo bonito que te da el fútbol. Ahí uno ve reflejado el esfuerzo y el trabajo. El día a día se ve recompensado a la hora de enfrentar estos partidos y tener la oportunidad de chocar contra figuras de alto nivel. De mi parte lo tomé con mucho agradecimiento y como un premio porque me estaba esforzando e iba por buen camino.
¿Enfrentar a Messi ha sido de los mejores regalos de su carrera?
– Sí, claro. Es de esas cosas que el dinero no compra. Estaban Messi, Higuaín, Di María, Zanetti. Es de esas cosas que quedan en la memoria y nadie las puede borrar.
¿A quién admira más, a Messi o a Cristiano? ¿por qué?
– A los dos. Nunca los he comparado. Siempre los he visto como grandes jugadores, cada uno a su manera y su estilo. Messi es un fuera de serie con esa parte natural y como que todo fluye. Cristiano es un jugador que ha trabajado y luchado para llegar ahí, tal vez lo que no traía lo fue creando o trabajando para llegar al máximo. Los he disfrutado a los dos.
¿Qué consejo les da a los jugadores jóvenes que lo van a enfrentar?
– Simplemente es aprovechar el momento y la experiencia, el nivel que van a enfrentar, que es un nivel de élite, y ahí se aprende mucho sin importar el resultado. Se ve el nivel en el que quiere jugar y qué hay que hacer para llegar a ese nivel. Eso es lo mejor de fogueos así, es la única forma de que uno pueda crecer como jugador, abriendo los ojos y viendo qué más tengo que hacer para estar en ese nivel.