La hiperactividad es un trastorno que se caracteriza por una intensa actividad motora, es decir el niño o niña se distrae con facilidad debido al movimiento; de modo que no se concentra en las clases de la escuela, no completa las tareas en el hogar y en muchas ocasiones se tornan desobedientes. Si sus hijos lo presentan le contamos que mediante la música logrará un balance, el cual le permitirá actuar con normalidad y sin tener que utilizar medicamentos.
Un estudio reciente dado a conocer por la universidad de Brigham Young de los Estados Unidos muestra que los menores con edades entre los 6 y 17 años que escuchan música clásica varias veces a la semana, desarrollan la capacidad de controlarse con mayor facilidad.
¿CÓMO SE DETECTA?
Los pequeños hiperactivos deben ser valorados por un médico, para que este confirme si verdaderamente padecen el trastorno, o bien si es parte del comportamiento por la energía que desarrollan. Muchas veces las problemáticas del hogar o de la escuela influyen en la aparición de los casos. Si usted nota los siguientes cambios esté alerta:
* El pequeño no atiende una actividad por mucho tiempo, por ejemplo si le lee un cuento no permanece concentrado o sentado.
* En las lecciones en el centro educativo tiende a levantarse sin motivo.
* Si al realizar alguna tarea la cambia por otra. O bien busca hacer varias sin lograrlo satisfactoriamente.
* Es desorganizado en sus cosas, sea con cuadernos o habitación.
* Muestra conductas de oposición deliberadas. Discute y se niega a obedecer a los adultos y molesta deliberadamente a otros.
¿CÓMO FUNCIONA?
La música es uno de los métodos educativos más completos. Por excelencia relaja a quien la escucha y para muchos es hasta sinónimo de baile.
El ritmo ejerce un efecto de sincronización sobre las ondas cerebrales, las cuales permiten mejorar la concentración y las capacidades de expresión.
También la estimulación musical promueve efectos de activación (sensorial, central, autónomo y motor), así como mecanismos que moderan el nivel de excitación. Los sistemas son activados por cambios internos en la química corporal y en el funcionamiento eléctrico.
Trate de seleccionar previamente algún instrumento que su retoño prefiera, sea el violín, la guitarra, o bien distintos sonidos combinados. También haga uso de las canciones con letras positivas, siempre y cuando estén de acuerdo con la edad. Seguidamente establezca un día y una hora, para ponerle de preferencia la tonada con audífonos. Haga uso de los lugares abiertos, por ejemplo el jardín o algún parque cercano a su vivienda.
De acuerdo con los especialistas estadounidenses se recomienda empiece con sesiones de 15 minutos y posteriormente auméntelas a 30 minutos.
Al paso de dos semanas ya debe observar los cambios.
Beneficios de la Musicoterapia |
- Le permite a los niños y niñas desarrollar el lenguaje y el oído.
- Facilita la expresión de sentimientos o pensamientos, los cuales ayudan a superar frustraciones por medio de canciones que reflejan estados de ánimo.
- Reduce los niveles de ansiedad e impone un sistema de respiración más profundo y relajado, mediante la ondas.
- Ayuda a fijar la atención y potenciar la memoria.
- El uso del propio cuerpo o distintos instrumentos, ayuda a mejorar la relación con otras personas.
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