Corea del Sur .(AFP)-Para los miembros de BTS ARMY, como se conoce a la base de fans del fenómeno del K-pop, el momento de la baja de Jin del servicio militar de Corea del Sur no podría haber sido más fortuito.
Apenas 24 horas después de que el miembro de mayor edad de la boyband más grande del mundo fuera dado de alta, la capital de Corea del Sur fue invadida por fanáticos de BTS, con decenas de miles de personas haciendo cola el jueves para unirse a la fiesta anual del grupo.
Organizado por HYBE, la agencia de la banda, el BTS FESTA del año pasado contó con la asistencia de 400.000 fans.
Se espera que el evento de este año, celebrado en un extenso complejo deportivo en el sur de Seúl, supere el récord, con Jin dando abrazos gratis en un lugar cercano a un grupo selecto de 1.000 afortunados ganadores de la rifa en un \”huggathon\”.
Con colas que se extendían hasta tres kilómetros alrededor del recinto de FESTA, los fans aparecieron desde las 7:00 am para asegurarse de poder conseguir la codiciada mercancía de la banda y tarjetas fotográficas gratuitas de sus ídolos.
BTS ha estado en una \”pausa\” que él mismo describe desde 2022, con los siete miembros reclutados sucesivamente para el servicio militar.
Debido a las tensiones con el Norte, que posee armas nucleares, Corea del Sur exige que todos los hombres menores de 30 años se inscriban en el servicio.
Después de su alta el miércoles, Jin dijo en la aplicación surcoreana Weverse que el \”huggathon\” fue idea suya y que \”inicialmente quería abrazar a 3.000 fans\”, pero que tuvo que aceptar un número menor debido a preocupaciones de seguridad.
QUERÍA ABRAZARLO
Mientras esperaba que comenzara la fiesta anual, la fan de BTS, Lisa Pavelchack, dijo que estaba muy orgullosa de Jin \”por hacer lo que tenía que hacer\” en la vida.
La mujer de Ohio, de 48 años, dijo que había volado a Seúl especialmente para el FESTA, al que asistía con amigos que había conocido en un concierto de BTS en Estados Unidos.
Ann Suwanan, una joven tailandesa de 19 años, estaba triste porque ella, al igual que Pavelchack, no iba a tener la oportunidad de abrazar a Jin.
\”Tenía muchas ganas de abrazarlo\”, dijo a la AFP.
Con un vestido de tul morado y un gran lazo morado en el pelo, dijo que \”lloró un poco\” de alegría cuando le dieron el alta a Jin.
Héctor Sosa, un padre de 40 años, dijo que había volado de México a Seúl para acompañar a su adorada hija miembro de ARMY.
\”Mi hija es fanática de ellos y vinimos a regalarle su cumpleaños\”, dijo.
\”Aterrizamos hoy a las 5:00 am en Corea del Sur y vinimos directamente aquí\”.