CONSULTA: Mi padre me abandonó cuando era un niño, eso siempre me ha dolido mucho. Ahora, para rematar, mi pareja me abandona. Ese dolor es muy profundo, por lo que me gustaría me aconsejara sobre esta situación.
RESPUESTA: Si existe algo que marca negativamente a una persona, es el abandono, sobre todo si sucedió en la infancia por parte de uno o ambos padres. También, cuando te abandona la pareja o un hijo en la vejez o en un momento difícil. Igualmente, cuando los amigos se van sin avisar en el momento que más los ocupabas. Todas estas experiencias de abandono, cuando son vividas causan dolor, conflicto, furia, molestia, tristeza y un corazón herido.
El abandono es la decisión del que abandona a no tener relaciones significativas con personas con las cuales es importante tenerlas. Ese contacto es necesario e indispensable para crecer en forma sana en cualquier etapa de la vida y solo a través de esa conexión se forma lazos fuertes.
Por eso, las personas que han sufrido de abandono en su infancia, juventud o adultez, desarrollan pensamientos de aislamiento, de autodestrucción y de víctima. Se orientan en un alto grado hacia la soledad. Su principal conducta es la de dependiente emocional. También suelen ser inseguras, todo esto se basa en un profundo miedo a que les vuelvan a abandonar.
“No estoy dispuesto a soportar que me dejen una vez más”, “nadie me apoya en esto”, “nadie me ayuda”, “prefiero estar solo”, “tú verás lo que haces”, “¿si me abandonan y no vuelven?”, “tengo mucho miedo a terminar solo en mi vida”, “y que, si nadie me llega amar, ocupo que alguien me ame”. Son sus modos internos de mirarse ante un problema o ante una situación con los seres que ama.
En algunos casos su mayor temor es la soledad y no soporta estar a solas consigo mismo; por desgracia al final acaba estando solo. Es retraído, no le gusta el contacto con los demás, genera un verdadero drama ante una mínima situación sin importancia, solicita y busca el apoyo de los demás ante los conflictos, ocupa aprobación constante y que se le tome importancia a todo lo que hace pues maneja mucha sed de reconocimiento y aceptación,
¿CÓMO SANAR ESTA HERIDA?
Es muy importante que aquella persona que ha sufrido abandono perdone a aquellos que le han hecho daño y trabaje inmediatamente el amor propio, uno debe quererse, aceptarse y gustarse a sí mismo, y nadie podrá amarnos como nosotros mismos (ámate como los otros no te amaron), es importante que construya dignidad propia y sobre todo que permita que Dios sane estas heridas y, sabes, él nunca te abandonará.
Mauricio Mora
Consejero Familiar
Para Citas y Charlas
Teléfono 8352 5000
mauriciomoracr@hotmail.com