Principal sospechoso solicitó revisar 39 discos con videos
Cuando todo parecía indicar que el juicio por el caso de la desaparición de la bebé Keibril estaba por llegar a su final, después de transcurrir de manera fluida, el principal sospechoso, de apellido Casasola, logró retrasarlo por más de una semana.
Tras escuchar las declaraciones de siete testigos presentados por la Fiscalía y exponerse pruebas sobre el hecho ocurrido en abril de 2023, una solicitud del imputado dio un giro al proceso.
Cuando los jueces estaban preparados para dar las fechas de las lecturas de las conclusiones del juicio, la abogada de Casasola indicó que su defendido deseaba observar los 39 discos que contienen los videos admitidos como prueba.
Son horas de grabación que documentan los movimientos de este hombre antes, durante y después de que se produjera el robo de la niña de nueve meses en la comunidad de Cervantes, en Cartago.
La abogada defensora, de apellido Hernández, explicó que Casasola no había tenido la oportunidad de observar esta evidencia, por lo que tenía derecho de hacerlo. Hasta el pasado jueves 17 de octubre, el implicado había logrado observar 31 de los 39 dispositivos, así que se espera que el próximo lunes finalice este proceso.
Una vez que Casasola concluya con esta tarea, los jueces indicarán las fechas para la lectura de las conclusiones, que se espera sea esa misma semana.
Lo único que podría ocasionar nuevamente un retraso sería que el sujeto desee prestar declaración durante el juicio, situación que no ha ocurrido desde el pasado 2 de octubre, cuando inició la audiencia.
EL JUICIO
Un par de días podría tomar la lectura de las conclusiones, de acuerdo con los abogados y fiscales. Esto podría definir el rumbo final del caso que hasta el momento, conforme declaraciones de testigos, cuenta con varias hipótesis sobre la desaparición de la menor.
Varios de los testigos señalaron que Casasola y la madre de la bebé, una joven de 13 años, habrían orquestado un plan con la intención de sacar a la pequeña del país porque una prueba de ADN que iba a efectuar el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) podía determinar la paternidad del sospechoso, lo que se consideraría un delito de violación, ya que se trataba de una menor de edad y el hombre tenía en ese momento 32 años.
Algunos familiares que se presentaron en el lugar el día de la desaparición manifestaron que observaron a la madre de Keibril “muy tranquila” posterior al supuesto robo. Además, ella habría confesado a representantes del PANI, que también llegaron en el momento, que todo había sido simulado, pero se habría arrepentido al final de participar en el plan orquestado por Casasola.
Desde ese momento, la muchacha fue trasladada a un albergue especial y Casasola fue detenido por las autoridades como sospechoso de la desaparición, por lo cual guarda prisión preventiva.
La Fiscalía solicitó desde el inicio del juicio que al imputado se le juzgara por tres delitos de violación y la sustracción de la bebé de nueve meses. Hasta el momento Casasola es el único señalado.
TESTIGOS OIJ
La Fiscalía presentó como testigos del caso a tres funcionarios del Organismo del Investigación Judicial (OIJ) que dieron varias pistas de lo que pudo suceder ese 9 de abril de 2023 en la zona conocida como La Chayotera, cerca de Mata Guineo.
El agente Weimar Torres informó sobre una serie de confesiones de testigos e incluso reportes anónimos, los cuales apuntaban que el sospechoso habría declarado que cometió un grave error posterior al robo de la bebé.
Por su parte, Kendall Vargas, perito judicial, dejó al descubierto una gran frecuencia de llamadas entre el imputado y la madre de Keibril, tanto el día previo como durante la desaparición.
Este alto tráfico de comunicaciones incluye conversaciones por la red social WhatsApp, de acuerdo con los reportes elaborados por las autoridades como parte de la indagación.
El OIJ también presentó como prueba videos que permitieron dar un seguimiento a los movimientos de Casasola desde que salió de su casa hasta que regresó con su padre, tras ir a buscar su carro, el cual quedó en la zanja de un cañal. No se determinó cómo ocurrió el incidente.
OTRAS DECLARACIONES
Un par de conductores informales confirmaron que observaron el vehículo del sospechoso el día que ocurrió el hecho, inclusive uno de ellos aseguró que trasladó a Casasola hasta su vivienda, luego de encontrarlo a la orilla de una calle mojado y sucio.
Sin embargo, uno de los testimonios más reveladores presentado por Fiscalía es el de un vecino de Cervantes que dijo ver juntos al sospechoso y a la madre de la niña el 9 de abril. Él declaró que se dirigía a visitar a un hermano el día del suceso, cuando iba de camino vio a la madre y a la niña en su coche.
Posteriormente, se habría encontrado a Casasola en un vehículo, en medio de una calle, y a la par del automóvil estaba la madre de Keibril con el coche. Incluso saludó a la pequeña al pasar.
El testigo explicó que minutos después vio a la joven llorando, pero él no se percató que había sido por el robo de la bebé. Tras algunas horas llegó hasta el lugar donde estaban todos los familiares de Keibril y al ver a Casasola decidió presentar una denuncia anónima ante las autoridades.
Una de las testificaciones que se esperó con mayor expectativa fue la de madre de la bebé, pero por ser menor de edad habló en una audiencia privada, donde no tuviera contacto visual con el imputado.
¿DÓNDE ESTÁ LA NIÑA?
A pesar de que en el juicio se han presentado varios testigos y de la diversidad de pruebas aportadas, hasta el momento no se ha determinado qué sucedió con Keibril.
El OIJ indicó en marzo anterior que, debido a las indagaciones del caso, la niña estaría fallecida, sin embargo, esta tesis no ha sido discutida en el debate, ya que a Casasola se le juzga por desaparición de una persona menor de edad y violación calificada. Hasta el momento, la Fiscalía ha presentado las siguientes pruebas:
Testimonios de personas que vieron al sospechoso en el lugar de la sustracción con la madre de la menor.
Videos que confirman movimientos de Casasola el día del robo de la niña.
Gran tráfico de llamadas entre el padre y madre de la bebé.
Vehículo que conducía el sospechoso ese día, que era fácil de identificar por una calcomanía que tenía en la parte delantera. Los testigos lo vieron en varios puntos.
Conversaciones en la red social WhatsApp entre la mamá de Keibril y el sospechoso de la sustracción.
Una manta encontrada en el vehículo de Casasola, que el imputado trasladó desde su casa el día del robo de Keibril.
Declaración de la madre de 13 años a funcionarios del PANI.
Un perito del OIJ dio a conocer una serie de comunicaciones registradas entre el imputado y la madre de Keibril.
Personal del PANI ha estado presente durante el proceso con la intención de resguardar los derechos de la madre de la bebé.