Alajuelense perdía contra el último de la tabla, Andrés Carevic era expulsado y el viernes se jugará el clásico contra Saprissa, un panorama desolador que prendía fuego al camerino rojinegro cinco días antes de visitar La Cueva. El León ardía hasta que apareció Joel Campbell para marcar el gol del empate, apagar el incendio y comprar un poco de paz antes del duelo contra el Monstruo.
La Liga dominó la mayor parte del encuentro, pero sin claridad en la jugada final comprometió el encuentro frente a un rival ordenado que maximizó sus pocos ataques y casi se lleva tres puntos de oro en su lucha por evitar el descenso.
Grecia se fue arriba en el marcador casi en la única ocasión clara que tuvo para marcar. Luego de una serie de rebotes en el área pequeña visitante Jefferson Rivera remató de derecha, el balón se desvió en un defensa de Alajuelense y terminó en el fondo de la red al minuto 57. Los locales sacaban petróleo del estadio Rafael Bolaños.
Carevic, que hizo cinco cambios respecto del partido ante Puntarenas, se fue expulsado al 62’ aparentemente por reclamar decisiones arbitrales. Campbell saltó a la cancha desde el banquillo al minuto 70 y la Liga inclinó la cancha hacia el marco defendido por el mexicano Liborio Sánchez, por cierto, figura de la cancha con varias buenas atajadas.
Nada pudo hacer el experimentado portero azteca para evitar el empate al 79’. Celso Borges se proyectó por la derecha y sacó un centro alto y largo cruzado al área. Joshua Navarro se la bajó de cabeza a Campbell, que tuvo todo el tiempo del mundo para controlar y rematar para anotar el gol del empate, el que apagó el incendio en que se hubiera convertido la semana liguista en caso de haber caído derrotados.