Para reforzar poder adquisitivo de consumidores
Tokio. (AFP) – El gobierno japonés aprobó un paquete de estímulo económico de 140.000 millones de dólares para reforzar el poder adquisitivo de los consumidores ante la inflación e impulsar el lento crecimiento, menos de un mes después del fracaso electoral de la coalición en el poder.
El conjunto de medidas estimado en 22 billones de yenes aún debe ser aprobado por el Parlamento, donde el gobierno del primer ministro, Shigeru Ishiba, no cuenta con mayoría.
En las elecciones legislativas del 27 de octubre, el Partido Liberal Democrático de Ishiba registró su peor resultado en 15 años y perdió la mayoría parlamentaria de su coalición gubernamental.
El programa de estímulo incluye subvenciones de unos 30.000 yenes (194 dólares) para el sector energético, ayudas directas a los hogares con bajos ingresos y ajustes fiscales, así como una ayuda a las pequeñas empresas, según el gobierno.
“El objetivo es llegar a que el aumento de los salarios supere regularmente a la inflación, y garantizar una transición hacia una economía orientada al crecimiento, impulsada por los aumentos salariales y la inversión”, indicó un comunicado.
El impacto global del proyecto se estima en 39 billones de yenes (cerca de 250.000 millones de dólares) al incluir los préstamos e inversiones del sector privado.
Todo ello se financiará con inversión pública adicional -unos 13.900 billones de yenes según el gobierno-, lo que requerirá la aprobación de un presupuesto rectificativo antes de finales de diciembre.
Para Ishiba relanzar el consumo era una prioridad, después de haber prometido apoyar a los hogares con rentas bajas y revitalizar las regiones rurales.
Pero el dirigente pagó el descontento de la población por la inflación y la ralentización de la cuarta economía mundial en las elecciones anticipadas de octubre.