Cada vez que compre una cerveza o una gaseosa deberá pagar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) directamente en el precio de venta. Esto ante una disposición del Ministerio de Hacienda.
No es posible saber si esto generará un alza o una disminución en el precio al consumidor, debido a que hay un cambio en toda la estructura de costo.
En mucho dependerá del margen de utilidad que tengan los distintos agentes económicos de la cadena de intermediación hasta que el producto llega a la pulpería, licorera o supermercado.
DIARIO EXTRA hizo un recorrido y encontró que todavía hay una existencia de inventarios en muchos comercios, aunque la medida incluye incluso el saldo disponible hasta diciembre de 2022.
De momento, no se apreció una variación considerable en los precios de las cervezas, cuyo valor rondaba de ¢1.000 a ¢1.100, mientras que las gaseosas estaban entre los ¢549 y los ¢330 por unidad.
Antes el impuesto se cobraba directamente en el precio de fábrica, es decir que siempre se incluía el IVA, pero en la primera parte de la cadena, ahora se hizo una separación cargándose en cada etapa, siendo la final el costo al consumidor.
Aparte se cobrará en la nacionalización y los distintos procesos de la distribución mayorista. De este modo, se podrá aplicar también el crédito fiscal.
La obligación de liquidar el IVA de esta manera quedó establecida de conformidad con la Ley N.º 6.826, es decir, cambiará la forma en que se calcula ajustándose a como lo hacen los demás contribuyentes.
Estos cambios aplican para todas las personas físicas o jurídicas que efectúen operaciones en el territorio nacional, dedicados a la importación, fabricación y venta de los productos especificados.
Para las empresas, aparte de los cambios en la forma de factura, implica incluir en las declaraciones juradas que se deben presentar mensualmente el IVA cobrado en las ventas de sus productos.