La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) comunicó que se encuentra haciendo un trabajo de intervención y revisión de los medidores inteligentes que se ubican en barrios del sur de la capital, específicamente en Desamparados.
Tal y como lo informó DIARIO EXTRA, la Compañía se encuentra detrás de unos ¢8 mil millones, aproximadamente, de montos no facturados en los recibos de electricidad, debido a que el medidor tuvo alguna manipulación o se encontraba en mal estado.
Según datos de la propia institución, por año, se estiman hasta ¢10 millones que se recuperan de montos no facturados.
REVISIONES
La CNFL indicó que entre este miércoles y jueves pretende hacer la revisión de al menos 280 clientes residenciales y 24 comerciales.
“Estas megaintervenciones garantizan a los clientes una facturación acorde a los consumos mensuales de electricidad, gracias a que las inspecciones permiten detectar y corregir posibles anomalías en los medidores”, dijo Ronald Villalobos, de la Unidad Recuperación y Control de Pérdidas de Energía.
En total son 304 medidores los que serán intervenidos.
AFECTACIÓN
Tal y como lo había informado El Periódico del Pueblo, la institución consideró que estos montos no facturados generan una severa afectación a sus finanzas.
“Impacta en la capacidad operativa y de inversión que la empresa realiza en la red de distribución, lo que puede significar un deterioro en la calidad y continuidad del servicio eléctrico, debido a la incapacidad de la empresa de poder utilizar todo el potencial de ingresos esperados para ser invertidos en la mejora continua de la red de distribución”, explicó la oficina de comunicación.
Precisamente, en la zona sur de la capital es donde más se registran problemas con los medidores, al ser uno de los lugares más densamente poblados de San José, algunos porque algún tercero les ha provocado algún daño.
La CNFL menciona que, para recuperar los montos no facturados, sigue lo establecido en la normativa de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), sobre la prestación de servicios eléctricos.
Otra problemática que enfrenta la institución es el robo de los medidores inteligentes, hasta el mes de setiembre se había reportado la sustracción de 160 dispositivos.