El Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder) se mantiene firme en desarrollar dos megaproyectos de infraestructura deportiva que tantas voces en contra tiene y que despierta una serie de dudas, a raíz de que el Pabellón Deportiva, por ejemplo, que va más adelantado, fue licitado por dos empresas en el doble de lo que dice la UCR que cuesta la obra (de $15 millones a más de $30). ¿Dónde está la abismal diferencia de presupuestos?
La Unidad Ejecutora del Proyecto se mantiene sin hacer público el presupuesto detallado que les entregó la UCR, por el que pagó una partida importante, que según una fuente de El Periódico de Más Venta en Costa Rica salió del crédito abierto que tiene la entidad deportiva con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). De hecho, el Icoder presupuestó de los $45 millones que contempla el préstamo, un monto por ¢7.746 para este 2018.
Así lo señala el informe de Evolución Fiscal y Presupuestaria del Sector Público de la Contraloría General de la República.
“Los recursos por financiamiento externo no han ingresado al Icoder, los cuales están referidos al contrato de Préstamo número 2184 con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BVIE) para financiar el Promorid, que contempla la construcción de los megaproyectos Centro Acuático María del Milagro París en La Sabana y el Pabellón Deportivo en el Parque de la Paz”, reza el documento emitido por la CGR.
El mismo documento detalla que “al respecto, el instituto indica que para dichos Proyectos se encuentran realizando estudios técnicos legales y financieros, por lo que para este año no se van a requerir los recursos del préstamo”.
Damaris Vega, gerente de área de servicios públicos generales, manifestó a este medio que “el Gobierno suscribió un contrato de préstamo con el BCIE con el fin de llevar a cabo básicamente dos proyectos y para que esos recursos ingresen se necesitan una serie de recursos técnicos, la parte del presupuesto, es decir, una serie de acciones y actividades que tiene que hacer el Icoder, entre ellos el proceso licitatorio, para la realización del proyecto. Mientras esto no se haya realizado los recursos no le van a ingresar”.
Los proyectos, que fueron anunciados en el gobierno anterior con bombos y platillos, siguen teniendo anticuerpos y generan una serie de dudas alrededor, que el Icoder con su unidad ejecutora no sale a aclarar en aras de la trasparencia de los mismos.