Las instalaciones de la empresa Alunasa ubicadas en Esparza se encontrarían en abandono al punto que el Ministerio de Salud giró una orden de prevención.
Los trabajadores que todavía se mantienen en una situación de indefensión alertaron que en la compañía permanecían 150 mil litros de aceite de laminación, un material que sin el mantenimiento adecuado podría resultar peligroso.
“Puede ser inflamable, hay unos sistemas auxiliares que son críticos. Le advertimos al patrono y entendemos que se le hizo una prevención a la empresa de 24 horas. Eso fue el sábado anterior y el lunes ya se lograron reincorporar a cuatro operadores de sistemas auxiliares, que si acaso les están pagando unos ¢50 mil por semana y tenían la póliza de riesgos del trabajo vencida, pero ya se pudo reactivar”, dijo José Luis Rosales, representante de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP).
Rosales también señaló que uno de los problemas es que los equipos que no se usan comienzan a deteriorarse. “Esta empresa en seis meses es un pedazo de chatarra. Hay una parte de las máquinas que tienen que estarse lubricando”, destacó.
La idea del sindicato de la ANEP es que el Consejo de Gobierno pueda recibir a los trabajadores para articular ayudas desde ahí, en la que solicitan esté presente la Cancillería. “Lo ideal sería que salga una comisión de alto nivel para atender la situación de Alunasa”, destacó.
Los representantes sindicales también interpusieron una solicitud de embargo preventivo, precisamente para intentar garantizarse el pago en caso de que la empresa decida cerrar sus puertas.
En este este momento, hay 176 familias costarricenses que están en total incertidumbre, a las que se suman otras siete venezolanas. Ya llevan dos meses sin recibir salario y dudan de que se les vaya a pagar el aguinaldo.
UN JUICIO LABORAL PUEDE
TARDAR 3 AÑOS
Los representantes sindicales aducen que ya no los dejan ni siquiera ingresar a la empresa y es por eso que también abrieron una nueva gestión ante el Ministerio de Trabajo.
Ricardo Marín Azofeifa, ministro de Trabajo a.i., comentó que desde el inicio han estado acompañando a los colaboradores. No se aceptó la suspensión de contratos de trabajo que pidió Alunasa debido a que alegaron falta de materia prima y esta se puede traer de otros lugares que no sean Venezuela.
“Se les dijo que debían continuar con los contratos normales porque no había una causal legal objetiva. Se hizo un proceso de inspección y se corroboró que hay una infracción a las leyes de trabajo por que no hay pago de salario. Esto se llevó a sede judicial, se interpuso hace mes y medio”, explicó.
En este caso no aplica la interposición de una medida cautelar por parte del gobierno, pues es una acción que debe recaer sobre los afectados en este caso los trabajadores.
Parte del problema es que los juicios laborales por la acumulación de casos pueden durar incluso hasta tres años en resolverse. En caso de que la empresa intente reabrir sus puertas, se podría intentar un arreglo para que antes cancele la deuda con los trabajadores.
En este momento, no hay muchas fuentes de empleo en Esparza, así que algunas personas se dedican a labores ocasionales en el puerto o algunas agrícolas. La deuda con la Costarricense de Seguro Social ya supera los ¢109 millones.