Con el arranque de semana inició también el periodo de veda establecido para la pesca deportiva y pesca comercial de pequeña escala del Golfo de Nicoya.
La medida se extenderá hasta el 31 de julio de 2023, inclusive, y tiene el objetivo de resguardar los procesos de reproducción y reclutamiento de las principales especies de interés comercial para este sector.
Según el acuerdo AJDIP/086-2023, emitido por la Junta Directiva del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca), la veda total de pesca se establece en el área comprendida por una línea recta imaginaria.
Esta va desde Punta Torres, conocida como Peñón, hasta el Faro de la Isla Negritos, por afuera; y desde ahí a la parte este de Punta Cuchillos, en la Península de Nicoya, y de esa línea aguas adentro, hasta la desembocadura del río Tempisque.
Todas las comunidades pesqueras en el entorno de la zona vedada del Golfo de Nicoya deberán cumplir con dicha disposición. En total cerca de 1.400 personas, entre permisionarios con licencia de pesca y ayudantes de pesca de la flota comercial de pequeña escala, se someterán a la restricción de pesca, que se declara cada año desde 1985.
SOLO PARA CONSUMO DOMÉSTICO
Los miembros de la Junta Directiva del Incopesca consideraron las vulnerabilidad social y económica de las comunidades costeras, por lo que aprobaron permitir la pesca para el consumo doméstico durante la veda.
“Quienes opten por realizar esta pesca, deberán cumplir con la normativa establecida por el acuerdo de Junta Directiva AJDIP-511-2017, para lo cual deberán estar registradas ante el Incopesca, solo podrán efectuarla mediante el uso de cañas, carretes o cuerdas de mano que pueda utilizar individualmente el pescador, el producto obtenido a través de la pesca domestica no podrá comercializarse, los anzuelos que se utilicen deberán ser tamaño 6 o 7 y tipo J, entre otros”, indicó Heiner Méndez Barrientos, ministro de Pesca y Acuicultura y presidente ejecutivo de Incopesca.
FORTALECERÁN VIGILANCIA
Con el objetivo de robustecer los procesos de control y vigilancia, ya se han iniciado coordinaciones en conjunto con el Servicio Nacional de Guardacostas, Fuerza Pública, el Servicio de Vigilancia Aérea, cuerpos policiales del Ministerio de Seguridad Pública, así como el Senasa, para desarrollar de manera conjunta labores de coordinación, inspección y capacitación en temas de combate a la pesca ilegal.
Estas acciones están encaminadas hacia una gestión pesquera eficiente que proteja la disponibilidad de recursos para la flota pesquera nacional, alineadas con los objetivos país de desarrollar una pesca responsable y sostenible.
El período de veda se establece cada año tomando en consideración los datos científicos para la regeneración de los recursos marinos, en aras de asegurar que el Estado pueda proteger la diversidad biológica como parte de su patrimonio natural, así como la protección y recuperación de las especies de interés pesquero.