La contabilidad es una herramienta importante que le permite a la alta gerencia la adecuada toma de decisiones en el corto, mediano y largo plazo, por lo cual debe realizarse en apego a su correcta aplicación, control y ejecución.
Si se complementa con un presupuesto adecuado, facilita a las empresas contar con pronósticos de sus operaciones de manera periódica (trimestrales, semestrales y con una liquidación anual), estableciendo así la estacionalidad del negocio (variantes en ciertos periodos del año).
A lo anterior le podemos agregar el uso del análisis del indicador financiero Earnings Before Interest Taxes Depreciation and Amortization (EBITDA), que significa “Ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización”, el cual mide el desempeño financiero de la empresa restando los intereses por pagar, impuestos, depreciaciones y las amortizaciones.
Al aplicar un análisis del indicador EBITDA la empresa tendrá más claro cuál es su capacidad de generar rentabilidad.
Lo anterior con una adecuada lectura de los estados financieros y de las razones financieras aplicadas a los mismos, de tal manera que se identifiquen las debilidades y fortalezas, aspecto que permitirá hacer lo más difícil que se debe de hacer en una compañía: tomar decisiones.
La alta gerencia podrá tomar decisiones con mayor cantidad de información, para minimizar el riesgo de pérdidas a corto y mediano plazo.
No olvidemos que las empresas son entes “vivos” que requieren de cuido y análisis de forma constante y directa. Se puede lograr utilizando la información financiera (contabilidad, presupuesto y EBITDA), tomando decisiones y mejorando controles, así, a mediano plazo, tendremos una empresa como la requerimos, tanto administrativa, comercial y estructuralmente.
La generación de esta información necesita de empleados capacitados, motivados e identificados con la empresa, que tengan “la camiseta puesta”, porque la información que se genera será el producto que se utilizará para la definición de las estrategias, registros y controles.
Tomar decisiones no es fácil y, por lo general, vienen acompañadas de consecuencias, deben tomarse de la forma más informada posible. Por lo tanto, la información financiera debe ser oportuna, correcta, eficiente y de calidad.
*Contador Público Autorizado Colegio de Contadores Públicos de Costa Rica