Con la llegada de la pandemia todos los sectores resultaron muy afectados en sus operaciones, sin importar a qué se dedican. La industria gráfica no es la excepción.
En la industria gráfica el 90% de las empresas sufrieron una afectación directa, teniendo que despedir personal, reducir sus jornadas e incluso cerrar sus locales.
Datos de la Asociación Costarricense de la Industria Gráfica (Asoingraf) señalan que las ventas cayeron entre un 75 y un 80% en todas las imprentas, sin importar su tamaño.
E incluso la competencia que ejerce el Gobierno con las imprentas institucionales les resta trabajo lo cual presiona el sector a la baja con las ventas y la quiebra.
No obstante, esto no fue impedimento para que Emmanuel Rojas, ligado a la industria gráfica por más de 40 años, ganara a finales de octubre el reconocimiento “Líder Gráfico de las Américas 2020”, que otorga la Confederación Latinoamericana de la Industria Gráfica (Conlatingraf).
Rojas es el gerente general del Consorcio Litográfico Herediano S.A. (Conlith), empresa familiar de la que es parte desde muy joven y en la que participa en la dirección desde hace 40 años junto con sus hermanos.
Rojas recibió el reconocimiento por su trayectoria en México, de manos de Héctor Cordero, presidente de la Confederación.
El gerente de Conlith conversó con DIARIO EXTRA sobre este reconocimiento y los retos de la industria gráfica.
A continuación, un extracto de la entrevista con él y William Vindas, expresidente de Asoingraf.
¿Cómo ha sido golpeada la industria gráfica a lo largo de los años?
-La industria gráfica ha cambiado y evolucionado mucho a lo largo de los años, tenemos más de 50 años y ha cambiado mucho. Tenemos colegas que no innovaron, que no adoptaron las nuevas tecnologías, lamentablemente se quedaron atrás y muchos de ellos cerraron. Es lamentable, pero es una ley del mercado. Más recientemente, no solo en 2020 con la pandemia, hemos venido con una serie de problemáticas que han afectado el sector, como los cambios tecnológicos. Está claro que con los dispositivos tecnológicos es más fácil recibir información que en años anteriores, como ocurrió con las revistas.
¿Cómo afecta la situación económica a la industria?
-Con respecto a la situación económica del país, y no solo de ahora, sino de años atrás, las imprentas que hacían facturas prácticamente murieron porque había muchas pequeñitas y al pasar el gobierno a una tecnología digital, que es entendible porque es más fácil controlar digitalmente las facturas que los millones que se imprimían. El apoyo del gobierno ha sido muy lamentable, no existe una política de apoyo a pymes, de apoyo a industriales pequeños, medianos, micro. Hablan de Banca para el Desarrollo, pero ponen un montón de requisitos.
¿Cuántas empresas resultaron afectadas o cerraron por la pandemia?
-La Asociación Gráfica hizo una encuesta, si mal no recuerdo en mayo, cuando la pandemia estaba empezando, pero cifras macro indican que en ese momento había golpeado a más del 90% del sector. Por no decir que todas, diría que un alto porcentaje de las empresas hemos reducido personal o hemos reducido jornadas, lamentablemente hemos despedido gente. Hay una zona cerquita de la Clínica Bíblica que se llama calle La Mácula, donde había un montón de imprentas pequeñas, que estaban una a la par de la otra. Eso es un desierto ahora. Ahí había por lo menos 150 imprentas, ahora uno va y asustan, quedan contaditas con los dedos de las manos.
¿Los cierres de fronteras les afectaron?
-Sí ha habido afectación, por ejemplo, Centroamérica. Estábamos importando papel de El Salvador, no pudimos seguir trayendo porque era un problema para que llegara el material. Cuando cerraban la aduana de Peñas Blancas se nos quedaron ahí un par de contenedores de papel, entonces eso significaba un atraso. Igualmente para los exportadores.
¿Bajaron las ventas?
-Prácticamente más de un 35% de las empresas ha cerrado. Las ventas han bajado entre un 75% y un 80% del 6 de marzo a octubre. El efecto de crecimiento ha sido por el fin de año, sobre todo por la parte de calendarios, pero la parte promocional ha sido tremendamente afectada.
¿Se sienten ignorados como sector?
-Hemos sido invisibilizados. Todo el mundo planteó sus problemas, pero nosotros hemos estado callados, no pasa nada y las empresas cerrando, quebrando con altas tasas de endeudamiento. Está todo como si la industria estuviera fuerte y más bien está malísimo.
¿Afectan las imprentas estatales?
-Sí, las litografías e imprentas estatales que hay en cada ministerio, la Caja Costarricense de Seguro Social, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados y el monstruo más grande, que es la Imprenta Nacional, que nos quita trabajo. Tenemos que pensar si realmente se justifica que la Imprenta Nacional se mantenga con el origen con que fue creada porque para crear un boletincillo digital y La Gaceta Digital tener ese monstruo que recibe un montón del presupuesto nacional la mayoría de la partida es para salarios. Son detalles que se deben estudiar. También nos han afectado mucho los tratados de libre comercio, que nos han restado mucho trabajo. Las imprentas estatales compiten desleal e ineficazmente, a veces compran máquinas de millones de dólares que no pagan impuestos y trabajan en la semana una o dos horas.
¿Qué servicios son parte de la industria gráfica?
-La industria gráfica es una industria vertical. Damos servicio al empaque como cajas, etiquetas, todo; también la producción de revistas, periódicos; la parte publicitaria como brochures, volantes y la parte de formularios.
¿Cómo fue el primer acercamiento con Conlatingraf?
-He venido participando en eventos de Conlatingraf desde hace 20 años, hemos hecho buenas amistades y me dieron el honor de presidir Conlatingraf de 2017 a 2019, dos años. Este año la Confederación tuvo la amabilidad de nombrarme Líder Gráfico de las Américas.
¿Qué significa este reconocimiento?
-Es un honor porque uno en estas cuestiones gremiales trabaja con mucho cariño por la sociedad y por el gremio, pero cuando hay este tipo de reconocimientos honran mucho porque reconocen que se hizo un buen trabajo en la presidencia y es un premio internacional. En esta época, en esta coyuntura tan complicada, es una buena noticia dentro de todo lo difícil que estamos atravesando el gremio y la sociedad.
¿Qué opinan del rezago del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) para capacitación?
-Tenemos más de 12 años de estar esperando el Centro Especializado de la Industria Plástica y la Industria Gráfica, que en algún momento licitaron, se lo dieron a una empresa y luego se cayó. El objetivo de ese centro era la preparación del recurso humano, tanto para la industria gráfica como para la industria plástica en la última tecnología, pero de la idea no pasó.
¿Qué vendrá en 2021?
-Asoingraf organiza la Expo Gráfica cada dos años. Este año tocaba, sin embargo por el Covid-19 no se pudo hacer y estamos esperanzados en que a setiembre del otro año se pueda realizar. Es un evento muy bonito porque aprovechamos para darle fuerte a la capacitación y traemos personas de otros países, por medio de Conlatingraf, quienes vienen a hablar de las nuevas tecnologías, exponemos equipos y softwares, entre otras actividades. Es una fuente de financiamiento para la Asociación.
¿Es la industria gráfica contaminante?
-Muchas personas dicen que para producir papel se tiene que talar los bosques del Amazonas y eso es un mito. Todo el papel tiene un porcentaje de reciclaje muy alto y viene de bosques controlados; es decir, son bosques que se siembran para eso, inclusive por cada árbol que se tala para producir papel se siembran tres.
EXTRA DIRECTO
Asoingraf: Importancia nacional de unión gremial
Conlith: Nuestra empresa de toda la vida
Conlatingraf: Importante institución regional
Líder Gráfico de las Américas: Un honor, un orgullo
Impresión digital: Tendencia moderna
Imprenta: Cultura, historia, futuro
Pandemia: Coyuntura difícil para todos
Banca para el Desarrollo: Atolillo con el dedo
Factura digital: Quiebra de imprentas pequeñas y medianas
Imprenta Nacional: Competencia desleal
Imprentas estatales: Limitación para la reactivación de la industria gráfica, no deberían existir
INA: Institución que debe reconvertirse