El personal de la fábrica de galletas Pozuelo se llevó un gran susto cuando le avisaron que debía acudir a las zonas seguras del edificio por un conato de incendio que se generó en unos ductos, una cubierta y el techo del espacio donde se encuentra el horno 6, lugar en el que se prepara la pastelería.
Los brigadistas de la empresa controlaron la emergencia con mangueras para evitar que el fuego dañara el resto de la estructura, por lo que cuando los bomberos llegaron la dieron por controlada.
De los aproximadamente 4.000 metros cuadrados de la estructura, solo entre 10 y 12 resultaron afectados.
“Afortunadamente no tuvimos pérdida de vidas humanas que lamentar y todo nuestro personal se encuentra bien”, comunicó la empresa mediante un correo electrónico.
Una vez controlada la situación, los operarios de la planta se dispusieron a volver a sus labores, pero al parecer únicamente aquellos que trabajan en este sector debieron dejar sus funciones.
BIEN CONTROLADA
“Esta es una empresa que siempre se ha preocupado en materia de seguridad, sistema de supresión de incendios, alerta temprana y además cuenta con una brigada, que fue la que realmente hizo todo el trabajo”, declaró Luis Salas, director operativo del Cuerpo de Bomberos.
La fábrica de galletas informó a DIARIO EXTRA que no tiene un estimado del monto económico que costará la reparación e inspecciona el área afectada para determinar el origen del fuego.
“Se está evaluando la estructura del techo y probando los equipos, (…), sin embrago, gracias a nuestros inventarios de seguridad y al buen estado en que se encuentran los equipos no tendremos ninguna afectación en el mercado”, explicó la corporación.