La embarcación pesquera Faustino I fue detenida por el Servicio Nacional de Guardacostas en colaboración con autoridades estadunidenses porque transportaba 1.500 kilos de clorhidrato de cocaína.
De acuerdo con el Ministerio de Seguridad, la nave era tripulada por cuatro costarricenses de apellidos Méndez (46 años), Miranda (40), Walsh (42) y Umaña (25), quienes pretendían introducir el estupefaciente a suelo tico.
La detención llevó un proceso de investigación desde el 2 de noviembre, cuando una fragata del Guardacostas de Estados Unidos realizaba un patrullaje preventivo en aguas del Pacífico y detectó el pesquero sospechoso.
En ese momento los norteamericanos alertaron a los nacionales y de esa manera se inició el proceso de investigación para dar con el punto donde se navegaba.
Fue así como a 5 kilómetros de la entrada al Golfo Dulce en Golfito, Puntarenas, en horas de la noche se ubicó la nave.
REVISIÓN DETALLADA
El Servicio Nacional de Guardacostas tenía la embarcación en su poder y alertó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que se encargó de realizar una revisión detallada.
En este procedimiento logró constatar que presentaba irregularidades en el interior del casco, pues tenía un doble fondo, en el cual transportaba los 1.500 kilos de cocaína, repartidos en 75 bultos.
Los agentes decomisaron el cargamento ilegal y lo trasladaron a las bodegas del Ministerio de Hacienda para su destrucción.
Por su parte, a los cuatro costarricenses los pasaron con un informe al Ministerio Público, que determinará su situación jurídica.