Un joven de 25 años identificado como Minor Steven Brenes Naranjo falleció luego de que en apariencia se le negara la ayuda por un fuerte dolor en el abdomen en el Centro de Atención Institucional (CAI) Gerardo Rodríguez, conocido como Cárcel Virilla.
El afectado tenía poco más de un año de encontrarse como indiciado, a la espera del proceso judicial en su contra, sin embargo murió el 21 de abril de 2020.
DIARIO EXTRA conversó con Nancy Naranjo, hermana del fallecido, quien comentó que el lunes 20 de abril habló con Minor Steven, quien le confesó que sufría unos dolores muy fuertes en el abdomen. Lamentablemente al día siguiente falleció.
La mujer narró que varios compañeros de celda le contaron que los dolores de su hermano comenzaron desde mucho antes, por lo que solicitó ayuda al encargado de la escuadra, de apellido Azofeifa, quien le dijo que no lo atenderían.
Los propios reclusos lo sacaron del pabellón porque ya no respiraba, no fue hasta ese momento que lo llevaron al Hospital San Rafael de Alajuela.
“Me dicen que mi hermano en la madrugada, amanecer martes, empezó con un fuerte dolor en el estómago. Los mismos reos empezaron a pedir ayuda para que lo trasladaran al hospital para que lo atendieran y vieran qué era lo que estaba pasando, pero no quisieron trasladarlo.
En ese momento el que estaba de jefe de escuadra era un hombre de apellido Azofeifa, él era quien debía dar el visto bueno para que lo trasladaran y no quiso, se negó. Los reos esperaron que fueran las 8 de la mañana y abrieran Oficialía para ver qué podían hacer. Dicen que a cada rato iban a pedir ayuda y no quisieron ayudar”, narró.
Naranjo contó que su hermano estuvo toda la madrugada con dolor, sin poder respirar ni hablar y pedía ayuda.
Cerca de la 1 p.m. le dijo a uno de sus compañeros de celda que ya no podía respirar, que le faltaba el aire. En ese momento todos lo sacaron del pabellón a Minor Steven para que los policías vieran que realmente se encontraba mal de salud.
“(Los policías) ni siquiera quisieron ir a ver si era que estaba pasando algo, nunca fueron a verlo para decir ‘solo es un dolor de estómago, ahorita lo llevamos’. Nunca hicieron nada, nunca fueron a verlo, hasta que vieron que ya estaba agonizando lo sacaron y fue cuando (Azofeifa) quiso dar el visto bueno para que lo trasladaran”, añadió.
No obstante, al llegar al Hospital San Rafael no logró recibir una atención médica oportuna.
Naranjo indicó que, según entendió, a su hermano lo hicieron esperar afuera para atenderlo, pero no aguantó y falleció.
“Por lo que dicen fue un dolor de estómago. Él tenía una úlcera y al esperar para recibir ayuda y que lo trasladaran empezó a empeorar. Cuando llegó al hospital aparentemente le estalló la úlcera. Eso es lo que me dicen, pero en el acta de defunción que me dieron en Medicatura Forense no sale nada de por qué murió, absolutamente nada”, expresó.
La mujer además está molesta con el personal del CAI Gerardo Rodríguez, pues nunca le comunicaron lo que ocurrió con su hermano.
“Cuando falleció me lo llegaron a contar, no fue que me dijeron. Un familiar que tiene al cuñado preso ahí fue quien nos llamó para informarnos, pero en la policía a mí no me informaron absolutamente nada. Imagínese que dicen que eso pasó a la 1 p.m. y yo me di cuenta a las 5 p.m.
Llamé al hospital para verificar, para que me dijeran si era cierto, y resulta que en el hospital nunca apareció porque él nunca ingresó. El acta de defunción dice que murió en el hospital porque estaba afuera en Emergencias esperando a ser atendido, pero no lo atendieron”, denunció.
Otro detalle que le parece extraño y contradictorio a Naranjo es que el acta de defunción indica como hora de fallecimiento las 2:20 p.m. del 21 de abril, pero cuando llamó a la Cárcel Virilla para consultar sobre la veracidad del hecho el oficial que le contestó le dijo que él ingresó a trabajar a las 2 p.m. y en ese momento le informaron que Minor Steven estaba muerto.
El abogado Javier Vargas, representante de la familia, aseguró a DIARIO EXTRA que analizarán los detalles del caso para presentar la querella y la acción civil resarcitoria por el delito de homicidio culposo en contra de la Policía Penitenciaria, el centro penal, civil y solidariamente el Estado, así como contra el Hospital San Rafael.
Brenes Naranjo era padre de un niño de 3 años y medio.