La Sede Arzobispal de San José comunicó este viernes la expulsión de la Iglesia Católica de un Presbítero de apellido Tamayo.
Así lo notificó el Arzobispo Metropolitano de San José, José Rafael Quirós, mediante un comunicado.
Esto por incurrir en el denominado delito canónico de “cisma”, que consiste en “el rechazo del reconocimiento y sujeción a la autoridad del Sumo Pontífice”. Es decir, en la figura del Papa Francisco.
“Pese a las advertencias dadas y una vez realizado el proceso penal administrativo, en donde tuvo la oportunidad de retractarse de su posición cismática y en su libre voluntad mantiene su posición de modo pertinaz”, señala el comunicado.
La Iglesia advierte a los feligreses que el Presbítero Tamayo quedó inhabilitado para realizar actividades litúrgicas.
De tal modo, no podrá realizar las siguientes actividades ministeriales:
- Santa Misa
- Licencias para administrar el sacramento de reconciliación
- Presencia del matrimonio canónico
- No puede celebrar el bautismo
- Eucarístía
- Ceremonia del culto
El Arzobispo Quirós es enfático en que si los fieles asisten a las actividades que realice el Presbítero Tamayo, pueden ser sujetos de excomunión.
“En caso de adherirse en adelante en ánimo a dichas celebraciones o enseñanzas corren en riesgo de incurrir también en la pena de excomunión, por el mismo delito de cisma”, concluye el escrito.
Grupo Extra consultó a la Arquidiócesis de San José, por una reacción ante el acto de excomunión.
Sin embargo, la vocería indicó que no agregarían más detalles ante la decisión de apartar al sacerdote.