Miles de fieles participaron del Miércoles de Ceniza, día en el que la Iglesia católica hizo un llamado al ayuno, la penitencia, la conversión y principalmente por el cese de la violencia.
En esta fecha que abre el tiempo de Cuaresma, también se instó a los feligreses a “peregrinar” en misericordia, evitar las tentaciones, avanzar hacia la conversión y tener un cambio.
“Este es un tiempo de fe. Esta Cuaresma nos debe llevar a celebrar la vida cristiana y evitar cualquier muestra de violencia a nivel personal y colectivo. Clamamos por nuestro país”, externó el sacerdote de la Catedral Metropolitana Víctor Hugo Munguía Castro.
Dicho mensaje viene de la mano con lo señalado por la Conferencia Episcopal de Costa Rica, la cual indicó que fuerzas destructoras se están “encarnando” en las estructuras sociales del país, generando “desintegración familiar, deterioro de relaciones, desprecio por la vida, altos índices de violencia, pobreza y exclusión”.
Ante ese panorama, el llamado a la feligresía es cultivar las “virtudes de fe, esperanza y caridad”.
“El principal llamado para las personas que están en la criminalidad es a la conversión y el arrepentimiento.
Dios nos dio libertad, no para hacer daño, sino para amar al prójimo”, sentenció.
Otro de los llamados de la Iglesia es estar vigilantes y orar por la salud del papa Francisco.
Punto a destacar es que posterior a la pandemia la colocación de la ceniza se empezó a imponer en la cabeza y no en la frente, lo que en su momento se explicó que el rito romano establecía que era mediante imposición, aunque este año se puso en ambas partes.
“Lo importante es el simbolismo de humildad y nos recuerde que ‘polvo somos y al polvo iremos’”, afirmó.

Fernando Romero
San Antonio de Desamparados
“Este es un tiempo de conversión y reflexión para los que somos creyentes. Dentro de las peticiones que tengo están mi familia, la salud de las amistades y la paz de Costa Rica. ¡Esto está muy fregado!”.

María Soledad Jiménez
Curridabat
“Nos preparamos con mucha fe y devoción. Siempre guardamos la Cuaresma y la Semana Mayor. En estos días santos, pedimos por la salud del papa, por nuestras familias y la paz del mundo entero”.

La Cuaresma son los 40 días previos a la Pascua.