La Contraloría General de la República (CGR) emitió un informe donde reveló incumplimientos por parte del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) en la compra de energía a proveedores privados.
El ICE suscribió cinco nuevos contratos para la compra de electricidad, generada con plantas existentes, sin el fundamento técnico pertinente y sin dejar trazabilidad de las negociaciones efectuadas.
Tampoco estableció términos de referencia y contrató plantas sin elegibilidad vigente, lo que es contrario a la normativa aplicable. Además, los acuerdos fueron firmados un año antes y por un plazo hasta tres veces mayor a lo que señala su propio Plan de Expansión de la Generación 2022-20402, señaló el ente contralor.
Este hecho, catalogado como “potente irregularidad”, fue descubierto por la CGR en el análisis que abarcó la gestión de compras de electricidad en apego al marco normativo y que se extendió en cuanto a compras, negociaciones y refrendo de convenios con los nuevos precios en los contratos vigentes.
Así mismo, pese a que el país se enfrenta al fenómeno de El Niño, que representa un riesgo para el sistema eléctrico ya que la mayoría de la electricidad de Costa Rica depende del agua, cuatro de los cinco contratos suscritos por el ICE con el sector privado son de plantas hidroeléctricas y las dos contratadas de mayor potencia no han podido cumplir con los compromisos de generación que aparece en los acuerdos.
OTROS VICIOS HALLADOS
El proceso se realizó con poca transparencia, rendición de cuentas y trazabilidad por lo que no hay garantía de que tales compras sean al menor costo ni en atención a las cantidades requeridas.
Se efectuaron pagos con tarifas no vigentes y precios no autorizados por la Aresep en relación con la compra de electricidad a generadores con contratos vigentes.
La negociación de nuevos precios a setiembre de 2023 tiene una probabilidad de representar mayores costos del 84,8% en la planta de mayor potencia contratada.