Miles de habitantes de La Carpio y barrios aledaños tuvieron ayer que ingeniárselas para caminar a San José, al ver interrumpido el servicio de la empresa Buses INA-Uruca Sociedad Anónima (Biusa), por una huelga de choferes.
El movimiento comenzó a las 3 a.m., cuando los conductores debían recibir los autobuses en el plantel en las cercanías del Rositer Carballo en la Uruca y concluyó a las 7:45 a.m., según los huelguistas.
Pese al miedo e incertidumbre de lo que pasaría con el paro, Reynaldo Rodríguez, uno de los líderes, explicó que la huelga fue la única opción de protestar por la reducción de media hora en el descanso para el almuerzo. Luego de una negociación se llegó a un acuerdo y el movimiento fue levantado.
Por su parte, los empresarios se negaron a dar declaraciones y solo enviaron un escueto comunicado de prensa, donde aseguran que el problema se suscitó debido a problemas de comunicación y a rumores.
“En nuestra empresa siempre se ha cumplido y seguirá cumpliendo con el respeto a todos los derechos laborales de nuestros trabajadores”, se indica en el comunicado firmado por Michel Salim Semaan Khachad, representante legal de la empresa.