Denuncia junta de salud
Una grave falta de infraestructura actualizada, poco espacio para la atención de los adultos mayores y equipo a la intemperie son parte de los problemas que denuncia la junta de salud del Hospital Blanco Cervantes.
En una visita guiada, la presidenta Alicia Avendaño mostró a Diario Extra algunos de las cuestiones que enfrentan los médicos y enfermos que asisten a este centro, especializado en la atención a la población de la tercera edad costarricense.
Los principales problemas se encuentran en el edificio central, donde se ubican las áreas de emergencia e internamiento, pues su estructura fue inaugurada durante la década de los sesenta, para atender a los pacientes enfermos de tuberculosis.
Desde que se ingresa al primer piso, los obstáculos comienzan, según señala la directiva de la junta de salud, pues “en este hospital no hay Unidad de Cuidados Intensivos, solamente intermedios, y si la persona se pone muy grave, tiene que trasladarse el San Juan de Dios, así sea en la noche y el área de choque solo hay una cama, si vienen tres pacientes deben esperar y hay veces que se mueren”.
Sumado a ello, solamente existe un baño para la parte de Emergencias, que tiene una capacidad de 40 personas, pero en promedio llegan a un centenar de pacientes a diario, según Avendaño.
Al continuar subiendo por estos pasillos nos topamos con tres pisos dedicados al internamiento, cerca de 140 camas destinadas a las personas adultas mayores, pero donde “el que se interna se sacó la lotería, porque ingresar es casi imposible”.
La presidenta indica que, a nivel interno, han decidido trasladar oficinas administrativas para poder atender a la mayor cantidad de población, la cual, además, corre peligro ante sismos o incendios, ya que no se cuenta con rampas para salidas.
“¿Cuál es el peligro con las zonas sí no existen en la salida de emergencia? Los pacientes están en riesgo, porque esta infraestructura ni siquiera cumple la Ley 7.600, de rampas o salida de emergencia adecuadas, es un riesgo inminente y un problema que los pacientes internados acá no puedan salir, hay planes de salida, pero es echarse al hombro los pacientes por esas gradas que están ahí”, explicó Avendaño, quien señaló una estructura que cuenta con tres pisos de escalones.
Este hospital espera pacientemente a que la junta directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social declare emergencia institucional, ya que los planes de reconstrucción los dejarían en espera hasta el 2030, aproximadamente.
“Primero nos dijeron que no había plata, segundo, nos quitaron de la lista de proyectos, pero luego peleamos y nos volvieron a incluir, nos llevan en puro trámite administrativo. El terreno ya está listo para empezar la construcción”, comentó la representante.
Ahora esperan, tal y como la fila de pacientes del hospital, que los trámites se agilicen antes de que el tiempo se acabe.
El equipo debe quedar a la intemperie para contar con espacio.