EE.UU. (AFP) – Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, se declaró no culpable de las acusaciones de tráfico de drogas en un tribunal de Chicago, adonde fue trasladado tras ser detenido junto con el cofundador del Cartel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada, la semana anterior en Texas.
En una vista en la corte federal de Chicago (norte de Estados Unidos), presidida por la jueza Sharon Johnson Coleman, Guzmán López, de 38 años, se declaró “no culpable”, confirmaron a la AFP fuentes del tribunal.
La jueza decretó que permanecería en prisión sin promesa. La próxima vista está prevista para el 30 de setiembre.
El hijo del Chapo, quien informó al tribunal que sufre problemas de tiroides y presión alta, fue inculpado en 2023 junto con tres de sus hermanos, conocidos como “Los Chapitos”, por tráfico de drogas, lavado de dinero y posesión de armas.
Su hermano Ovidio Guzmán fue extraditado desde México el año pasado y también se declaró entonces no culpable de las acusaciones en un tribunal de Chicago.
Guzmán López fue detenido el pasado jueves, cuando el avión privado en que viajaba aterrizó en un aeródromo cerca de El Paso, estado de Texas.
Con él viajaba El Mayo Zambada, uno de los fundadores del Cartel de Sinaloa en los años 1980, junto con El Chapo, quien cumple cadena perpetua en los Estados Unidos.
La semana pasada Zambada, de 76 años, también se declaró no culpable en una corte federal de El Paso de todos los cargos, entre ellos narcotráfico, blanqueo de dinero y conspiración para cometer asesinato.
El jueves está prevista una nueva vista en una corte de El Paso, a la que debe asistir Zambada.
La llegada de los dos narcos a El Paso, donde fueron detenidos por agentes estadounidenses, es objeto de especulaciones.
Según la prensa estadounidense, que cita fuentes judiciales locales, Joaquín Guzmán López traicionó a quien fue socio de su padre y lo convenció para que embarcara con él en un avión con destino al norte de México, pero que aterrizó en el país vecino.