Territorios Palestinos. (AFP) – Hamás declaró que está dispuesto a negociar la liberación de los rehenes todavía retenidos en la Franja de Gaza. También plantea una utna (tregua) con el Estado de Israel.
Desde hace meses varios países mediadores (Catar, Estados Unidos y Egipto) han pedido al grupo ultrafundamentalista islámico que acepte una serie de exigencias de Israel para mermar los ataques que se realizan principalmente en Gaza.
No obstante, Hamás exigía que Israel aceptara un alto el fuego completo y permanente antes de negociar.
No obstante, un alto cargo de dicho grupo, bajo condición de anonimato, dijo a la AFP que lo anterior “ya se superó”, lo cual deja entrever que están dispuestos a negociar con el gobierno de Benjamin “Bibi” Netanyahu.
DUDAS
A pesar de lo anterior, en Tel Aviv existen dudas: Israel enviará una delegación en los próximos días a Doha para mantener conversaciones con mediadores cataríes, pero la oficina del primer ministro Netanyahu indicó que persisten las brechas para alcanzar un acuerdo con Hamás, que gobierna en Gaza desde 2007.
Los diplomáticos de los tres países mediadores también sostienen diálogos en Egipto, informó Al Qahera News, medio cercano a los servicios de inteligencia egipcios.
PRIMEROS
ACUERDOS
Hasta ahora los mediadores internacionales solo han conseguido que las dos partes alcanzaran una tregua a finales de noviembre, que permitió la liberación de 80 rehenes a cambio de 240 palestinos presos en Israel.
Según el alto funcionario de Hamás que habló con AFP, el movimiento islamista informó a los mediadores que desea se cumplan tres etapas.
En primer lugar, la entrada en Gaza de 400 camiones de ayuda al día, después la retirada del ejército israelí del “corredor Filadelfia y del paso fronterizo de Rafah”, situados entre el sur de Gaza y Egipto, y posteriormente una “fase final” consistente en la retirada completa del territorio palestino.
“La pelota está en el tejado de los israelíes”, afirmó la fuente, estimando que las conversaciones podrían durar “de dos a tres semanas”, “si Israel no bloquea las negociaciones, como ha hecho anteriormente”.
La oficina de Netanyahu afirmó que “cualquier acuerdo permitirá a Israel regresar y luchar hasta que se alcancen todos los objetivos de la guerra”.
PRESIONES
Mientras eso acontece en el Sur, el grupo fundamentalista libanés Hezbolá disparó una andanada de cohetes contra cuatro objetivos militares en el norte de Israel, en especial un centro de reconocimiento estratégico en el monte Hermón, en los Altos del Golán sirio ocupado por Israel.
Se trata de “la operación más importante realizada por sus fuerzas aéreas” desde el 8 de octubre, según el movimiento.
El ejército israelí declaró en un comunicado que “interceptó” varios “objetivos aéreos”, entre ellos “un dron explosivo que cayó en una zona despejada de la región del monte Hermón”, que no dejó heridos.
EVACUACIÓN
El conflicto estalló el 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a 1.195 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a 251 en el sur de Israel, según un recuento de la AFP basado en datos oficiales israelíes.
El ejército israelí estima que 116 personas permanecen cautivas en Gaza, 42 de las cuales habrían muerto.
En respuesta, Israel lanzó una ofensiva en el territorio palestino que ha matado a 38.153 personas, también civiles en su mayoría, según el Ministerio de Salud de Gaza.
La Media Luna Roja Palestina informó que 6 personas murieron en un bombardeo israelí contra una casa en Zawaida, en el centro de la Franja de Gaza.
En el norte del territorio nueve personas perecieron en ataques contra edificios de Ciudad de Gaza, según la Defensa Civil.
Las tropas israelíes siguen combatiendo en varios sectores que el ejército dijo controlar anteriormente, como el barrio de Shujaiya, en Ciudad de Gaza, y en Rafah, en el extremo sur.
Igualmente, en Ciudad de Gaza el ejército israelí emitió nuevas órdenes de evacuación para habitantes y desplazados de tres barrios, pidiéndoles dirigirse hacia el oeste, cerca de la costa.
Hamás informó que 4 personas murieron en un bombardeo israelí de una escuela que acogía desplazados en la misma ciudad, al día siguiente de que 16 fallecieran en un ataque aéreo israelí también contra una escuela, gestionada por la ONU, en el centro del territorio.
El ejército israelí afirmó que apuntó a objetivos “terroristas”.