El Ministerio de Hacienda se muestra opuesto a pasarle recursos a las becas Avancemos, distintos programas sociales y al Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi).
TIJERA
Durante semanas, distintas organizaciones han venido denunciando recortes a personas menores de edad e incluso, se ha denunciado que más de 13.000 niñas y niños atendidos por el Programa de Acogimiento Familiar se ven afectadas por recortes aplicados por el Patronato Nacional de la Infancia (PANI).
A ello tiene que sumarse recortes en más de 15.000 becas Avancemos, afectación a más de 47.000 beneficiados en el Programa de Atención de Familias y más de 1.700 perjudicados en el Programa de Cuidado Infantil.
Solo en el programa Avancemos presupuestado para 2024 se redujeron más de ¢12.000 millones.
“Los recortes están afectado de forma directa a cientos de niños vulnerables del sistema (…), cuando tenemos niños y niñas en abandono, los estamos condenando. Llamamos la atención sobre esta situación porque el Estado no está cumpliendo sus obligaciones (…).
Muchos recortes de estos subsidios los sufren personas con discapacidad, incluso colocando el subsidio por debajo de lo establecido”, explicó Óscar Valverde”, director de Fundación Paniamor y representante de la Mesa de Trabajo por una Agenda Social para los Cuidados de las Niñas, los Niños y las Personas Adolescentes en Costa Rica.
“Cuando los niños tienen este tipo de situaciones van a tener dificultades para incorporarse al mundo, los afectados son miles y eso debe alertarnos. ¡Tenemos el presupuesto más bajo en educación!, ¡no es poca cosa!”, añadió.
En diciembre de 2023 la junta directiva del PANI acordó que el subsidio mensual de la modalidad Acogimiento Familiar con Subvención disminuiría de ¢132.000 a ¢109.000 para las personas sin condiciones de salud especiales, lo que representa una reducción del 17,31%.
Por otra parte, el monto para menores con discapacidad pasará de ¢158.000 a ¢123.000 para una disminución del 21,87%.
PRIORIDADES
Sin embargo, a pesar de la situación, Nogui Acosta, ministro de Hacienda, señaló que se debe priorizar en materia económica.
“(…). Hay que ponerse a pensar qué es primero, desde el punto de vista de Gobierno necesitamos crear espacios y eso significa reducir la relación deuda-Producto Interno Bruto (PIB), lo más pronto posible.
Pudimos haberlo hecho antes, pero por la forma como nos financiamos y otras circunstancias, no lo logramos (…), había que crear un colchón de liquidez para enfrentar los vencimientos de este año. Reducir la relación deuda-PIB significa ¢200.000 millones que podemos usar para financiar gasto social.
El país tiene demasiadas prioridades. Para el presupuesto 2024, los diputados decidieron pasar plata a seguridad, tienen que escoger que hacer primero (…). Yo coincido con la necesidad recursos, pero en este momento, no tenemos la capacidad de hacerle frente a ese gasto. Esperamos que, en el 2025, veamos una mejora en el pago de intereses y endeudamiento para darle a los menores”, dijo a DIARIO EXTRA.
Acosta cuestionó que se impulse una moción para girar los recursos mediante presupuesto extraordinario.
“Tenemos comprometidos los gastos de Gobierno y hay que pensar que la priorización no es solo del Poder Ejecutivo. Los diputados decidieron (plata para) seguridad en 2024 (…). Llegara cuando haya recursos y, en este momento, no los tenemos”, sostuvo.
BANHVI PEGA EL GRITO
Otros que pegaron el grito al cielo fueron los miembros de la junta directiva del Banhvi, los cuales señalaron que desde Hacienda no les han girado más de ¢10.000 millones.
Dichos recursos estaban incluidos en el Presupuesto Nacional 2023, para el Fondo de Subsidios para la Vivienda, no obstante, acusaron que no los han recibido.
TAMPOCO
Se le consultó a Acosta si giraría los recursos al Banhvi y señaló que no lo tiene contemplado.
“Esos recursos fueron movidos por los diputados del pago de intereses para darlos al Banco Hipotecario. Como los presupuestos son una autorización máxima de gasto, no necesariamente se van a girar. ¡No se van a girar!