Chicago. (EFE) – La selección de Estados Unidos venció ayer por 1-0 a la de Panamá con gol del delantero Brek Shea y logró su quinto título de la Copa Oro de la Concacaf en la duodécima edición del torneo.
El gol definitivo del partido llegó al minuto 69 y permitió a Estados Unidos concluir el torneo invicto al ganar los seis partidos disputados y marcar 20 anotaciones.
Pero la clave en el gol estadounidense volvió a ser la combinación de Alejandro Bedoya, que hizo una gran penetración por derecha, centró y Landon Donovan la rozó dentro del área pequeña para que llegara a los pies de Shea, quien solo tuvo que mandar el balón al fondo de la portería de Jaime Penedo.
El gol fue el segundo de Shea en el torneo y volvió a ser decisivo, como el que logró ante Costa Rica en el último partido del grupo C para que Estados Unidos venciera también por la mínima.
Estados Unidos propuso más que Panamá, que se limitó a defender y su contraataque nunca existió ni creó peligro.
De ahí que los norteamericanos no solo tuvieron el control del balón sino que fueron el mejor equipo sobre el terreno del Soldier Field de Chicago, que registró una asistencia de más de 50 mil espectadores.
Con este triunfo Estados Unidos llegó a su quinto título, uno menos que México, que fue eliminado en la semifinal por Panamá. Estados Unidos, que también les ganó a los panameños en la final de 2005 en serie de penales por 3-1, consiguió los otros tres títulos en 1991, 2002 y 2007.
La ausencia en el banquillo de Estados Unidos de Jürgen Klinsmann hizo que Andreas Herzog, su asistente principal, ocupara el puesto de máximo responsable del equipo de las barras y las estrellas.
Pero la ausencia del alemán no se notó porque Estados Unidos confirmó que ya tiene un estilo de juego definido, y aunque la selección que jugó en la Copa Oro ha sido la \’B\’, demostró que puede ser también la \’A\’ al mantener la racha triunfal que llegó a los 11 partidos sin conocer la derrota.
Ambos equipos de inmediato mostraron sus cartas en el campo, con un Estados Unidos que fue el que más propuso en el ataque, ganó la pelota, tuvo movilidad y rotó mucho mejor las posiciones de sus jugadores.
Panamá no tenía respuesta a ese juego y apostó a mantener la solidez defensiva, que le ayudó durante la primera parte con el empate a cero, dado que ninguno de los dos equipos creó situaciones de peligro.
Su gran mérito fue controlar al hombre gol de Estados Unidos, Donovan, quien esta vez no pudo marcar, pero sí participó en la jugada del gol que iba a decidir el triunfo y el título de su equipo.
Mientras que Panamá desapareció en el ataque porque su dupla de delanteros, formada por Gabriel Torres y Blas Pérez, no estuvo asistida con balones claros.
Tampoco el centrocampista y cerebro del juego de la selección canalera, Alberto Quintero, tuvo su mejor día.
Estados Unidos, que fue dueño y señor durante toda la segunda parte, tuvo la oportunidad de anotar el segundo gol al 84\’, cuando Eddie Johnson falló solo dentro del área pequeña un balón que solamente debía tocarlo para que entrase.