El Gobierno de la República únicamente apostará a un proyecto de ley que permitiría la apertura del mercado eléctrico nacional.
Mediante decreto remitido a la Asamblea Legislativa, Rodrigo Chaves, presidente de la República, y Natalia Díaz, ministra de la Presidencia, retiraron toda la agenda que se estaba discutiendo en el Congreso y únicamente dejaron en la lista el expediente de ley 23.414.
Dicha propuesta plantea el traslado de funciones de regulación en materia eléctrica, además, que el acceso a las redes de transmisión y distribución eléctrica sea libre para cualquier persona física o jurídica, incluidos los generadores privados de electricidad.
Asimismo, permitiría la compra y venta por parte de particulares mediante subasta.
MALESTAR
La decisión de Gobierno no cayó nada bien en Cuesta de Moras por varios motivos.
El primero es que dicha propuesta cuenta con más de 200 mociones por discutirse, en términos llanos, el proyecto estrella de Gobierno no va a salir de la noche a la mañana.
A lo anterior, se debe sumar que en la agenda antes convocada se encontraban proyectos de seguridad y Casa Presidencial los sacó de un plumazo para darle prioridad a un plan que se encuentra trabado en Cuesta de Moras, considerándolo como una contradicción, ya que el Ejecutivo los critica por no avanzar en esos proyectos, pero los retira.
De igual modo, genera criterios divididos entre los diputados. Las fracciones de los Partidos Unidad Social Cristiana (PUSC), Nueva República (NR) y Liberal Progresista (PLP) respaldan la propuesta.
Por su parte, el Partido Frente Amplio (FA) y algunos legisladores del Partido Liberación Nacional (PLN) se mantienen reacios a avanzar con el plan que ya se encuentra en el Plenario.
Finalmente, se debe recordar que la oficialista Pilar Cisneros indicó que el proyecto de Gobierno buscaría realizar mesas de trabajo.
CRÍTICAS
“Nos parece lamentable e irresponsable de parte del Gobierno que en vez de propiciar que se avance y aprueben proyectos que tienen mayor estudio y negociaciones previas con importantes acuerdos, como en materia de seguridad, continúen con esta iniciativa.
No solo no tiene acuerdo, no se le ha dado posibilidad de discusión en la comisión, tiene el interés de la privatización y debilitar la soberanía energética en el país que es fundamental”, señaló Antonio Ortega, diputado del FA.
Criterio similar tuvo María Marta Carballo, jefa de fracción del PUSC.
“Anteriormente tuvimos esa misma situación con el proyecto 4-3 y fue poco productivo en la generalidad de proyectos que el país requiere. Reconocemos la importancia de avanzar con ese proyecto, pero debe existir un compromiso de avanzar con los temas que le urgen al país, como los de seguridad ciudadana que se deben atender con urgencia”, precisó.
MÁS CRÍTICAS
Los cuestionamientos no solo vienen desde Cuesta de Moras.
Si se aprueba tal y como está redactada hasta ahora la propuesta de Ley de Armonización del Sistema Eléctrico Nacional, beneficiaría solo a las grandes industrias y encarecería la tarifa eléctrica para las familias.
Así lo asegura la Cámara de Empresas de Distribución de Energía y Telecomunicaciones (Cedet), la cual planteó que la iniciativa urge importantes correcciones, ya que tendría un impacto negativo en las pequeñas y medianas empresas, así como para los usuarios residenciales.
“En lo que hemos insistido es que no puede haber subsidios de ninguna índole que vayan a cargar costos a otros grupos, como a las residencias. Dependiendo de lo que se apruebe podría generar situaciones particulares a las mismas distribuidoras que ponen en riego sus inversiones actuales. Estos temas quedan muy a la subjetividad si se aprueba la ley tal y como está ahora”, advirtió Erick Rojas, vicepresidente de la Cedet.