Una delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI) visitará a Costa Rica para verificar si el país cumplió una serie de metas formuladas en un acuerdo que firmó en el pasado, ante lo cual el Gobierno se muestra positivo.
DOS SEMANAS DE EVALUACIÓN
La misión del FMI estará las últimas dos semanas de octubre en suelo nacional para realizar sus evaluaciones.
Durante su estancia se reunirá con autoridades económicas, diputados, representantes del sector privado, sociedad civil y académicos.
Ding Ding será el jefe de la misión del FMI, quien lideró una visita a nuestro país en abril de este año.
“(Es) importante señalar que el país desde que tiene el acuerdo de facilidad ampliada con el Fondo Monetario Internacional recibe visitas periódicas. Esta semana y la siguiente tenemos la misión del FMI para evaluar el cumplimiento de metas”, indicó Nogui Acosta, ministro de Hacienda.
ABUNDA EL POSITIVISMO
En Hacienda aseguran que los números les da para pensar que Costa Rica marcha por buen camino, aunque aún deben mejorar en algunos indicadores.
“Queremos decirles a los costarricenses que, según los datos que tenemos, vamos a tener un superávit del 1,7%.
La meta con el Fondo Monetario Internacional es del 1,3% del PIB. Estaremos cumpliendo con holgura esta meta, pero también en el tema del endeudamiento”, comentó.
“Tenemos una meta, que tiene una particularidad en el tema de la cartera, que es dólares, es un tipo de cambio de ¢635 por dólar. Aun así con esas características estamos por debajo de la meta del FMI.
En lo que se refiere a las acciones cualitativas hemos cumplido a cabalidad con cada una de ellas. Creo que será una visita exitosa, tendremos buenas noticias para empresas internacionales, pero sobre todo para el país”, añadió.
Por su parte, el presidente Rodrigo Chaves señala que si el país cumple con los requisitos, se va a liberar de la deuda en un alto porcentaje, pero no es momento de bajar los brazos porque sería retroceder.
“No nos van a tener a mecate corto, nos vamos a comportar responsablemente, como lo hemos hecho. Podíamos haber roto el convenio, vamos a seguir con esa disciplina”, aseveró.
“Fíjense en Venezuela, una situación difícil de superinflación. Esas cosas ocurren, cuando los estados, leyes, ministros, legisladores se comportan irresponsablemente (…)
El hecho de que podamos meterle ¢810.000 millones a la deuda no significa que podamos salir a hacer fiesta y hacer un óleo de dinero porque ¿cuánto dinero nos queda por pagar? Son como ¢36.000 millones. Lejos de pagar esa deuda, de soltarles la hipoteca a generaciones futuras”, puntualizó.
NO DEJAR TODO A MEDIAS
Para cumplir la mayoría de metas a solicitud del FMI, el ministro de Hacienda advierte que si los diputados manosean proyectos referentes a temas fiscales pueden alejar al Gobierno del cumplimiento de objetivos.
El Gobierno también quiere erradicar la costumbre del tico de dejar todo a medias cuando ve que las cosas van saliendo adelante.
“El país no puede darse el lujo de estar bien y dejar el compromiso. Esto es similar a las personas que les dan un tratamiento para siete días, pero resulta que al día cinco se sienten bien y lo dejan, las consecuencias pueden ser malas. Por eso me uno al presidente en un llamado a la Asamblea: hacerles huecos a los proyectos fiscales tiene consecuencias. Las realidades de esos países se dan por gastos desmedidos”, manifestó Acosta.
“Lo responsable para el país, la imagen que tenemos, es entender que el acuerdo de facilidad ampliada nos dio una serie de parámetros que hemos venido cumpliendo.
Lo que deberíamos hacer ahora es recoger los frutos de ese esfuerzo. Recoger esos frutos es graduarnos, no seguir un acuerdo de facilidad ampliada. Todo esto garantiza una contingencia”, cerró.