Washington.- “¡Pucha! Yo fui a votar con dos sombreros. Como ciudadano estadounidense había que informarse con responsabilidad, aunque no le voy a mentir, ya queremos que pasen las elecciones. Estamos hartos de recibir comerciales y propaganda en los celulares.
Pero diay, qué le digo. Uno también tiene el sombrero de tico y fui a votar pensando en mi país, en lo que más le pueda servir a Costa Rica, cuál candidato podía ser mejor para el lugar que uno lleva en el corazón”.
Rafael Guevara vive en un suburbio en Leesburg, Virginia, a 45 minutos de Washington DC.
En nuestro país vivió en Tres Ríos, cuando “aún eran cafetales”, relató orgulloso a DIARIO EXTRA.
Más allá de lo coyuntural, asegura que estos comicios los marcaron de por vida a él y su familia de cinco miembros.
Espera que “todo cambie para bien tanto aquí (Estados Unidos) como allá (Costa Rica)”, sin embargo, para eso habrá que limar asperezas entre políticos y la sociedad estadounidense.
“(Las elecciones) fueron muy fuertes. Yo como latino las viví intensamente. Como migrantes tenemos una sensibilidad por las cosas que se dijeron, pero diay, también hubo que hacer mucha cabeza como ciudadano estadounidense y ponerle mucho corazón como tico.
La mitad de los votantes estuvieron desilusionados y eso incluye a los costarricenses y comunidad latina. Quien sea que gane, va a tener que unir a todos”, agregó.
“ME PREOCUPA…”
Contrario a lo que muchas personas piensan, la principal preocupación no es la policía migratoria, ni las deportaciones.
Según Guevara, el tema económico y el desempleo tienen en vilo a miles de personas y eso incluye a la comunidad costarricense en los Estados Unidos.
“La economía no anda bien, tampoco la seguridad. Hay mucha tensión sobre esos temas. Los candidatos, ambos, han venido diciendo que traerán las empresas de vuelta aquí, que quitarán impuestos, que darán incentivos…
Uno dice: ‘¡Qué bien! ¡Van a reactivar la economía!’. Pero en simultáneo piensa en la gente de allá (Costa Rica) que podría quedarse sin un trabajo o una entrada (…)”, manifestó.
A ello se suma el acceso a los servicios de salud. En los Estados Unidos 46 millones de personas no tienen seguro de salud porque no pueden pagarlo.
“La salud nos tiene en vilo. Tenemos el Obamacare demócrata (póliza médica destinada a hacer más accesibles los servicios de atención). No es la mejor del mundo, pero enfrente los republicanos no tienen una alternativa. Dicen que quieren eliminarla, pero no creo que vayan a hacer mayores reformas.
Hace poco me tuvieron que hacer una cirugía de rodilla y a las 20 atenciones me dijeron: ‘Papito, se me va para la casa’. ¿Qué hace uno? ¿Cómo se la juega? A buscar videos a YouTube. Obviamente todas esas cosas preocupan y mucho (…) Habrá que esperar qué pasa con todos esos temas”, concluyó el especialista en informática.