El 4 de mayo Rodrigo Chaves, presidente de la República, junto con representantes de taxistas y plataformas digitales para el transporte de personas, presentaron un proyecto de Ley que parecía por fin complacer a todas las partes.
No obstante, solo cinco meses después, la Fuerza Roja se apartó de forma oficial de aquel acuerdo y presentó por su cuenta un texto sustitutivo a la iniciativa del Ejecutivo ante la Asamblea Legislativa.
De acuerdo con lo manifestado por Gilberth Ureña, representante del Foro Nacional de Taxistas ante la Comisión Ordinaria de Gobierno y Administración del Congreso, la cual analiza el proyecto de Ley una vez presentada la iniciativa inicial, desde la empresa Uber decidieron oponerse a que se regularan las tarifas y que se rotularan las unidades.
Desde ese momento los grupos representantes de taxistas decidieron separarse de la propuesta del Gobierno y empezaron la redacción de su propia iniciativa de Ley.
Afirman que esta propuesta regulará todas las plataformas bajo tres principios básicos: todos los vehículos deben ser autorizados de previo; es decir, debe de emitirse un permiso tal y como se hace con los taxis. También debe haber un solo modelo tarifario y, por último, todos los que presenten el servicio de transportes deben de estar bajo la misma norma.
Afirman, asimismo que, el texto sustitutivo que presentan coincide en un 70% con lo acordado con Luis Amador, ministro de Obras Públicas y Transportes, durante las negociaciones para la primera propuesta.
TODOS TAXIS
De aprobarse esta nueva iniciativa, básicamente, todas las plataformas pasarían a trabajar como taxis y de una forma muy similar a lo que establece la Ley 7.969 la cual indica, por ejemplo, que las tarifas son establecidas por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos.
De esta manera dicen los taxistas, se abrirían a la modernización y a las necesidades de miles de personas que en este momento dependen de las plataformas digitales.
“En la Unión Nacional de Taxistas creemos que las plataformas deben ser reguladas para que se inscriban y se afinquen en este país, que tengan teléfonos que atiendan a las personas y, lo principal, que solo deben trabajar con vehículos autorizados y como punto esencial, al ser todos de una misma norma, todos con la misma tarifa”, dijo ante la Comisión Rubén Vargas, de la Unión de Taxistas Costarricenses.
Según Ureña, los taxistas intentaron combatir a las plataformas multinacionales con sus propias aplicaciones, sin embargo, cada vez que lo hicieron, las apps bajaban las tarifas al piso.
“No podemos competir con tarifas de ¢900 y ellos con ¢200”, dijo.
Otro punto que regularía la Ley, en caso ser aprobada la propuesta de los taxistas, es un número limitado de autos con el permiso de brindar el servicio.
Ureña agrega que hay empresarios en este momento con 100, 200 o 300 carros que alquilan a choferes de las plataformas.