Cada 27 de setiembre el mundo celebra el Día del Turismo, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de este sector en nuestras economías y sociedades.
En Costa Rica esta actividad no solo es una fuente de ingresos, es un pilar fundamental que sostiene el desarrollo económico y social.
Según datos del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), el año pasado este sector económico generó $4.751 millones.
Atraídos por la exuberante biodiversidad, paisajes impresionantes y la calidez de nuestra gente, millones de turistas llegan cada año, dejando una huella positiva en nuestras comunidades.
Sin embargo, en un mundo cambiante debemos plantearnos cómo fortalecer y diversificar esta industria. La apuesta por el ecoturismo se presenta como una oportunidad inmejorable.
Costa Rica ha sido pionera en la conservación ambiental y al posicionar nuestros recursos naturales como atractivo turístico podemos generar ingresos que promuevan la sostenibilidad.
Desde la observación de aves en nuestras selvas tropicales hasta la exploración de los arrecifes coralinos en el Caribe, cada experiencia ofrece no solo un deleite para el visitante, sino también un compromiso con la preservación del medio ambiente.
Además la transición hacia energías renovables es crucial en este contexto. Costa Rica se ha destacado como líder mundial en energía limpia y esta visión debe reflejarse en nuestro modelo turístico.
Fomentar prácticas sostenibles y ecológicas en hoteles, transporte y actividades recreativas no solo atrae a un turismo más consciente, sino que también asegura que nuestro entorno natural se mantenga intacto para las futuras generaciones.
Sin embargo, para que el turismo siga siendo un motor de crecimiento es fundamental enfrentar desafíos internos que amenazan nuestra imagen y seguridad.
La promoción de valores como la paz y la democracia debe ser prioritaria, ya que son la base de un entorno seguro para visitantes y residentes.
La seguridad, tanto en términos físicos como sociales, es un componente esencial para atraer turistas y mantener su confianza.
La inversión en educación, cultura y el fortalecimiento de nuestras instituciones son pasos necesarios para construir un país donde todos podamos prosperar.
Al celebrar el Día Mundial del Turismo reafirmamos nuestro compromiso con un desarrollo sostenible que no solo beneficia nuestra economía, sino que también protege nuestro rico patrimonio natural y cultural.
Costa Rica tiene la oportunidad de liderar el camino hacia un turismo que además de buscar el beneficio económico promueve la equidad, la paz y el respeto por nuestro entorno.
Aprovechemos esta ocasión para imaginar y trabajar juntos por un futuro en el que el turismo siga siendo un motivo de orgullo y un ejemplo de sostenibilidad en el mundo.