A nivel nacional la deserción y el cambio de carreras son fenómenos cada vez más recurrentes.
Datos afirman que el 30% de los estudiantes que cambian al menos una vez de carrera durante sus estudios universitarios, no tuvieron previamente un acompañamiento u orientación.
Pero además, esto llega a impactar directamente en su bienestar y seguridad en la toma de decisiones.
La falta de profesionales de Orientación Vocacional en las instituciones educativas afecta la elección de carrera en estudiantes.
Foto: Randall Sandoval66 colegios iniciaron clases sin profesionales de orientación. De las 27 regionales educativas del país, solo 7 cuentan con cobertura completa en esta área.
“Estos números son una gran alerta para nuestro país. La Orientación que reciben los estudiantes en sus aulas además de tener un impacto en la inseguridad a la hora de elegir su futuro profesional, también puede generar insatisfacción a la hora de ejercer una profesión que no esté alineada con su perfil vocacional; adicional, una elección poco informada también repercute negativamente en el desarrollo del país”, afirmó Elisa Meza, experta en Orientación y vocera de la plataforma Personalidad Vocacional.
Fotografía: Randall Sandoval
Según Meza, esta problemática afecta posteriormente de manera directa en la economía del país.
“Durante el 2024 el monto promedio por estudiante del Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) asignado a las universidades públicas, como es el caso de la UCR, fue de 541.000 colones mensuales, por lo que las altas tasas de deserción y cambio de carrera representan un desperdicio de fondos públicos, retrasando a su vez el desarrollo económico y social del país”, dijo la experta.
Ante este tipo de situaciones, iniciativas como Personalidad Vocacional, se han convertido en un aspecto clave para estudiantes que buscan herramientas en su proceso de autoconocimiento y toma de decisiones vocacionales.