El Gobierno de la República reconoció este martes que la tramitación del proyecto Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (expediente 20.580) no tiene relación con el nuevo proceso de dialogo con los sindicatos.
En Zapote aseguran que, tras estudiar las propuestas de los gremios sobre la reforma fiscal, muchos de los puntos que piden ya forman parte de esa iniciativa de ley, y otros temas que no avalan se deberá discutir en una nueva ronda de negociaciones.
Eso sí, de antemano avisan que esos puntos no entrarán en el proyecto.
Cabe mencionar que, según el documento “Una reforma fiscal justa y solidaria para Costa Rica”, entregado al gobierno el 20 de julio, los sindicatos proponían medidas como crear un impuesto sobre ganancias extraordinarias obtenidas por los bancos con altas tasas de interés, eliminar los privilegios tributarios para los rendimientos de los fondos de inversión y congelar los montos de las dietas pagadas a miembros de juntas directivas de entidades públicas, por dos años, por citar algunas peticiones.
Agustín Castro, ministro interino de la Presidencia, dijo que pese a las recomendaciones de los sindicatos (tanto las que comparten como las que no) el proceso del expediente continuará.
“El proyecto 20.580, su tramitación, su negociación y demás es un proceso que continúa. Creo que ya se han colado por ahí los avances de diálogo en la Asamblea Legislativa y eso es totalmente aparte del proceso de dialogo con los sindicatos, no hay mezcla entre ambos temas”, aseguró tras consulta de DIARIO EXTRA.
Añadió: “El proceso de diálogo se va a dar, pero el proceso del expediente va a continuar tal como está conocido en la moción y eso está en el ámbito estrictamente legislativo”.
Para gremios como la Asociación de Empleados Públicos y Privados (ANEP) la aclaración hecha este martes por Castro deja claro una exclusión de los sindicatos en el proceso de construcción de la reforma fiscal y que en Casa Presidencial atendieron a los representantes de los trabajadores por puro trámite.
Añaden que cuando en Zapote se refieren a que muchos puntos en los que concuerdan ya están contemplados en el proyecto de ley los tratan de “ignorantes” y “plagiadores”.
“Quien contesta esa carta no tiene ningún poder político (Marvin Rodríguez) porque quien manda es Edna Camacho (ministra coordinadora del Consejo Económico del Gobierno), Rocío Aguilar (ministra de Hacienda) y Rodolfo Piza (ministro de la Presidencia).
Es una burla. Don Agustín es un funcionario de segundo nivel, ni siquiera tuvieron capacidad en Zapote para poner una figura de peso para responder”, manifestó Albino Vargas, secretario general de ANEP.
Steven Núñez, ministro de Trabajo y Seguridad Social, añadió que en cuanto a las nuevas rondas de negociaciones se espera definir el día en que se realizarán y en la reunión inicial se acordará la metodología a desarrollar.
Además confían en que los representantes de la Iglesia Católica se mantengan como garantes. Núñez dijo que concuerdan en temas como los escáneres para fortalecer el trabajo en adunas, mientras que entre los que no apoyan está la idea de gravar las zonas francas.
¿QUÉ PROPONÍAN LOS GREMIOS?
Crear un impuesto sobre ganancias extraordinarias obtenidas por los bancos con altas tasas de interés.
Hacer que los bancos asuman el costo de supervisión.
Aumentar, temporalmente, la tarifa de impuesto sobre grandes utilidades, del 30% al 36%, a grandes contribuyentes.
Eliminar los privilegios tributarios para los rendimientos de los fondos de inversión.
Congelar los salarios de lujo de toda la alta jerarquía del sector público y de funcionarios con remuneraciones superiores a ¢5 millones por dos años.
Congelar los montos de las dietas pagadas a miembros de juntas directivas de entidades públicas por dos años.
Aumentar temporalmente impuestos sobre dividendos de 1,5%.
Prohibir que se otorguen y mantengan exoneraciones a personas físicas o jurídicas que no están al día con el fisco o con la CCSS.
Bajar el impuesto sobre la renta de los salarios pequeños y subirlo para los salarios de lujo.
Hacer que los bancos paguen una contribución especial temporal para financiar la educación pública.
Crear una exoneración temporal para el alquiler de locales comerciales por parte de micro, pequeñas y medianas empresas.
Crear un impuesto extraordinario al existente sobre los casinos y salas de juego.
Reducir el financiamiento de los partidos políticos para las próximas elecciones municipales y nacionales.
Establecer temporalmente una contribución especial solidaria a las zonas francas.
*Fuente: “Una reforma fiscal justa y solidaria para Costa Rica”