Lic. René Cubillo Vásquez*
En un principio la función de la auditoría se limitaba a la mera vigilancia, con el fin de evitar errores y fraudes, a lo que denominamos “auditoría transaccional”. Sin embargo, el concepto de auditoría que conocemos actualmente es muy distinto, ya que el auditor busca determinar la razonabilidad de las cifras que se presentan y expresan en los estados financieros de las empresas, bajo un marco de referencia debidamente aceptado, como las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) que, en nuestro país, el Colegio de Contadores Públicos de Costa Rica ha adoptado.
El enfoque de auditoría ha evolucionado en gran medida con la aparición de las Normas Internacionales de Auditoría (NIAS), de hecho, la NIA 315 Identificación y valoración de los riesgos de incorrección material, brinda al auditor herramientas para que la dirección de una fiscalización financiera sea bajo un “enfoque basado en riesgos”. De ahí que la identificación de todos los posibles riesgos de declaraciones erróneas en los estados financieros a los que está expuesta una compañía es una materia que debe ser considerada dentro de la planeación y ejecución de un plan de inspección.
Tanto así que un enfoque basado en riesgos requiere que el auditor tenga un amplio sentido de atención, ya que su esfuerzo debe dedicarse a las áreas de alto riesgo de la compañía, en lugar de dedicar tiempo y recursos en aquellas cuentas contables que representan un nivel de riesgo bajo.
Esto quiere decir que el auditor externo debe conocer al cliente, su negocio, su entorno, saber qué lo afecta, cuáles son las principales amenazas y debilidades de control interno a las que está expuesto, para así identificar los riesgos y evaluarlos con el fin de determinar si pueden generar errores significativos en los estados financieros. Una vez identificados y evaluados los riesgos, el auditor debe diseñar los procedimientos y pruebas en respuesta a esa evaluación.
En conclusión, la evaluación de riesgos es una herramienta que el auditor debe llevar a cabo en la etapa de planificación de la auditoría (etapa inicial), con el fin de determinar el enfoque que debe llevar a cabo en la ejecución de la revisión, y por ende el alcance que debe llevar a cabo mediante la aplicación de procedimientos de fiscalización, tanto de pruebas de control como sustantivas y analíticas.
*Contador Público
Autorizado-7779
Colegio de Contadores Públicos de Costa Rica