En la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL) alertan a la población costarricense sobre estafas cometidas por personas que utilizan su nombre y cédula jurídica para obtener diversos productos.
Muestra de lo sucedido son los expedientes 18-019296-0042-PE y 18-023732-0042-PE, ambas denuncias interpuestas por esa institución ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
En la UNGL informaron que el método que utilizan las personas inescrupulosas es por medio de llamadas telefónicas, correos electrónicos y solicitud de cotizaciones a su nombre, además de usar el logo.
Los supuestos pagos de los estafadores, uno de ellos identificado como Luis Roberto Salazar, según manifestaron en la organización, son realizados por medio de cuentas congeladas o cheques sin fondos, también envían órdenes de compras por medio del correo actividadesgobiernoslocalescr@gmail.com.
Jessica Zeledón, vocera de la UNGL, dijo a DIARIO EXTRA que se han percatado de al menos 10 casos de engaño, en los que figura una compra de 150 sillas plegables, donde la empresa proveedora perdió ¢2.300.000.
También, dos empresas lograron detener los procesos a tiempo, una de ellas, dedicada a la venta de paños, cuyo monto solicitado en producto por los estafadores era de ¢2.450.000.
“Estamos muy preocupados de que utilicen nuestra institución para estafar a la gente y queremos alertar a la población para evitar más engaños. Hemos recibido llamadas por parte de proveedores quienes aseguran haber sido contactados para solicitarles bienes a nombre de la UNGL, lo que afecta el buen nombre de nuestra institución y perjudica económicamente a las pequeñas empresas víctimas de estas estafas”, señaló Zeledón.
“La primera vez que nos enteramos, fue porque llegó un camión lleno de cables eléctricos, nos iban a entregar el producto porque supuestamente no nosotros lo habíamos comprado. Explicamos que no hicimos tal proceso y que más bien, ellos podrían ser víctimas de estafa”, añadió.
PAGO ADELANTADO DELATA
Una empresa dedicada a la elaboración de paños, estuvo cerca de perder ¢2.450.000, sin embargo, la malicia del representante, quien guardó su identidad por temor a represalias detuvo el trámite.
El proveedor confirmó que todo el proceso de la estafa se da por llamada telefónica, donde le pidieron una cotización a nombre de la UNGL.
“Yo les dije que, por la cantidad de paños, debían enviar una orden de compra y la pasaron, muy similar. También, les pedí un adelanto del 50% y Luis Roberto me dijo que no había problema.
Para el 14 de agosto, me enviaron el comprobante de depósito, sin embargo, el dinero no se reflejaba en la cuenta bancaria”, explicó el proveedor.
Tras las dudas, se presentó al banco y le informaron que no había dinero y que posiblemente se tratara de un cheque sin fondos. Posterior a ello, no atendieron más las llamadas del estafador.
El Periódico del Pueblo intentó localizar al Luis Roberto Salazar, aparente estafador, para conversar sobre el caso, sin embargo, al llamar al celular que ponía a disposición de los proveedores, se indicaba que estaba apagado.