A casi 3 semanas del grito que pegaron los diferentes medios de comunicación costarricenses por la amarga noticia de DIARIO EXTRA sobre el espionaje a uno de sus periodistas, las autoridades judiciales han comenzado a señalar algunos puntos de avance en la investigación policial, los cuales si bien es cierto no son lo que se esperaba, ponen en evidencia que el proceso comenzó a caminar.
En ediciones anteriores, El Periódico de Más Venta en Costa Rica arremetió contra los investigadores, pues la denuncia iba prácticamente a “paso de tortuga”, ya que de forma continua señalaban no saber qué había pasado con los expedientes y tan solo se había obtenido una respuesta de la Corte alegando que los documentos ya habían caído en manos de un personero de Inspección Judicial del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Ante toda esta molestia e incertidumbre, DIARO EXTRA decidió consultar al licenciado Rodrigo Flores, director de Inspección Judicial, acerca del proceso que se está llevando con el expediente de la denuncia interpuesta por Grupo Extra, esto para conocer realmente por dónde camina el asunto.
AVANZA A PASO LENTO
Aunque la respuesta tardó algunos días, Flores apuntó a través de un correo electrónico que ya todo está en avance, no obstante, no puede referirse mucho al tema por órdenes legales.
“Al respecto, debo indicarle que el proceso de investigación ya está en marcha, se encuentra en la fase de recolección de pruebas y se hacen los esfuerzos necesarios para finalizarlo a la mayor brevedad posible. Por impedimento legal no puedo referirme al caso concreto y lo que se ha investigado por el momento. Lo anterior en acatamiento a las disposiciones normativas de la Ley Orgánica del Poder Judicial que regula la aplicación del régimen disciplinario en esta institución”, afirmó Flores.
OTRAS INSTITUCIONES PRESIONAN
Días atrás, la Defensoría de los Habitantes mostró su molestia luego de que la Corte Suprema de Justicia rechazara la recomendación que hicieron para suspender de forma momentánea a Francisco Segura, director del OIJ, alegando que este no tenía ninguna causa en su contra. Dos días más tarde se dio a conocer que Segura había sido rastreado por el Instituto Costarricense Sobre Drogas (ICD) por supuestos abusos telefónicos.
Otro caso anexo a la denuncia por espionaje es el escándalo de los chalecos vencidos que compró el OIJ en 2006 y 2007, mismo que fue expuesto por una agente del Poder Judicial, quien años después fue detenida supuestamente por filtrar información al periodista Manuel Estrada.
El camino de la investigación comenzó y aunque en el Poder Judicial aseguran querer sacarlo lo más pronto posible, la Ley Orgánica les permite llevarlo por un “atajo” de 1 año.