La cantidad de vehículos robados durante el presente año sigue siendo la piedra en el zapato del Ministerio de Seguridad Pública en relación con los delitos contra la propiedad.
Hace pocas semanas criminales llegaron a dos predios para robar automotores, los cuales se han vuelto muy atractivos para los grupos delictivos vinculados al sicariato, que incluso tendrían unidades de reserva para efectuar este tipo de asesinatos a nivel nacional, de acuerdo con Mario Zamora, ministro del despacho.
“Notamos una correlación entre la actividad del sicariato y el robo de vehículos, normalmente la actividad, ya sea en motocicleta o en automóviles, se da con vehículos robados”, explicó.
Esto significa que existen organizaciones criminales que en un solo lugar mantienen de 10 a 15 vehículos que usan con estos fines.
“Vemos que, al crimen tradicional, que era el robo de vehículos para venta de repuestos y lucrar de ese negocio, se está agregando la acción del crimen organizado, que los utiliza como medios de transporte”, agregó.
ESCUELAS DE SICARIATO
La especialización del sicariato para extender el control de las bandas delictivas a todo el país es una de las novedades que preocupa a expertos en seguridad.
Así, la presencia de exfuncionarios judiciales, policiales y militares liderando la capacitación de los delincuentes para mejorar sus estrategias representa todo un desafío para la seguridad nacional.
“Lo que ha cambiado completamente la estructura de poder de los criminales es la especialización de grupos de sicarios y gatilleros con entrenamiento paramilitar y parapolicial, con armas abundantes, con campos de entrenamiento donde los vienen a entrenar expolicías y exmilitares”, detalló Álvaro Ramos, ex viceministro de Seguridad.
“Tenemos noción de que han venido también hondureños, panameños y colombianos a Costa Rica a entrenar a criminales costarricenses, esto realmente está sucediendo”, subrayó.
Las autoridades judiciales recientemente efectuaron allanamientos para desarticular una “agencia de sicariato” que está ligada por lo menos a cuatro homicidios en San José.
Una de las preocupaciones de los expertos es la edad de los involucrados, ya que cada vez son más personas menores las que son reclutadas por estas organizaciones.
MINICARTELES
La unión de agrupaciones criminales en la Zona Atlántica es otra inquietud, especialmente por la conformación de un minicartel en el Caribe que se ha extendido a lugares como Turrialba en Cartago y hasta Nosara en Guanacaste.
“Esta parte es novedosa porque está cambiando la estructura del poder del crimen organizado. Eso no había sucedido en el pasado, por lo menos en la forma que está sucediendo ahora”, dijo Ramos.
A esto se suma el uso de recursos tecnológicos, como el empleo de drones para llevar drogas, entre otros objetos, a centros penales, también el uso de celulares y más elementos de comunicación por parte de los delincuentes.
COMBUSTIBLE
Alrededor de 1,4 millones de litros de combustible fueron sustraídos durante los primeros meses de 2024, lo que equivale aproximadamente a unos 44 camiones cisternas llenos.
Las autoridades han señalado que el uso de este combustible para las actividades criminales es parte de la problemática que atraviesa el país. “No podemos permitir que el combustible de los costarricenses termine en manos de la delincuencia”, dijo Manuel Steller, viceministro de Seguridad.
“Este combustible que le pertenece a todos los costarricenses termina en manos del narcotráfico para financiar las actividades ilícitas”, subrayó.
OPINA
Álvaro Ramos
Ex viceministro de Seguridad
“Lo que ha cambiado completamente la estructura de poder de los criminales es la especialización de grupos de sicarios y gatilleros”.