Estremecedoras son las imágenes de los destrozos que dejó el pasó de los fuertes aguaceros en La Tigra de San Carlos, Alajuela. A pesar de que el tiempo ha mejorado en las últimas horas, aún existe una amenaza inminente ante la gran acumulación de material suelto en los cerros de la zona. Casas cubiertas de lodo, ríos sucios, peluches bañados en barro, puentes dañados, más de 200 afectados y alrededor de 50 personas albergadas es parte del aterrador panorama al que sobreviven los lugareños, quienes en dos días vieron la lluvia que debía caer en 15.
San José, Las Palmas, San Rafael, San Gerardo, Calle Jiménez y El Futuro, en La Tigra, fueron los barrios más golpeados.
Gerardo Céspedes, miembro de la Asociación de Bosques Eternos de los Niños, del Grupo de Conservación de Monteverde, inspeccionó con la Cruz Roja y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
“La desgracia ya ocurrió, sin embargo lo peor aún no ha venido, una pequeña lluvia generaría desprendimientos y los cerros se desplomarían”, explicó.
La CNE realizó un sobrevuelo y descartó la posibilidad de un represamiento en la parte alta del río La Tigra, pero advierte el posible desprendimiento de material, por eso advierte a los vecinos extremar las medidas de seguridad y estar muy atentos al comportamiento de este cuerpo de agua.
DAÑOS ASCIENDEN A ¢150 MILLONES
Funcionarios del Comité Municipal de Emergencias de San Carlos valoran los daños generados en las viviendas, sin embargo de momento la cifra preliminar llega a ¢150 millones, pues los daños incluyen 7 puentes (2 de los cuales están en rutas nacionales), varios caminos comunales y deslizamientos que mantuvieron incomunicados a varios pueblos.
El servicio eléctrico ha sido restablecido en algunos sectores por parte de Coopelesca, el Instituto Costarricense de Electricidad brinda el servicio de telecomunicaciones en esta zona, excepto la telefonía fija e Internet, que no están habilitados aún.
No obstante, el servicio de agua potable aún no ha sido restablecido en su totalidad en todos los sectores.
TIEMPO MEJORA
Eladio Solano, experto del Instituto Meteorológico Nacional, aseguró que para los próximos días se espera el ingreso de una masa de aire seco, lo que provocaría una tendencia a la baja de las lluvias.
No obstante, este fin de semana nuevamente nos acompañarían los fuertes aguaceros característicos de la época.
“El aumento de los vientos dará un respiro en los suelos y esto quizás ayudará en la filtración del agua acumulada, pero para el viernes las condiciones húmedas volverán. Hay que tener claro que las lluvias no desaparecerán por completo, solo disminuirán”, explicó.
SARAPIQUÍ TAMBIÉN GOLPEADO
En Sarapiquí unas 90 personas (18 familias) resultaron afectadas por el aumento en el caudal de los ríos, de las cuales solo dos (8 personas) aceptaron movilizarse a un albergue temporal.
Las diferentes instituciones que conforman el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo respondieron de inmediato a rehabilitar las líneas vitales y atender a la población afectada.