Los países latinos tenían una breve ventaja sobre el avance de Covid-19 en el mundo. El contagio, registrado por primera vez en Asia, ha avanzado rápidamente en Europa, donde países como España e Italia han sufrido un crecimiento incontrolado de víctimas. Luego, Norteamérica y Oceanía empezaron a presentar proliferación del Covid-19 entre la población, incluido Estados Unidos, que ahora es el país con más casos y muertes registrados a la fecha.
No pasó mucho tiempo para que América Latina y África tuvieran los primeros casos. Si bien dicen que Europa y Asia ya han experimentado el pico de la enfermedad, otras regiones intentan prepararse para semanas difíciles. ¡Pues, casi todas!
Entre los países latinos, las naciones que han aplicado acciones más efectivas a favor de su población para combatir el virus son Uruguay, Argentina y Perú, seguidas por las medidas de Bolivia, Cuba y Panamá. La investigación fue realizada por la firma Ipsos. Los últimos clasificados son México, Venezuela y Brasil, quienes han sido resistentes a tomar decisiones pertinentes a las situaciones de salud públicas generadas por el Covid-19.
El ministro de Salud de Brasil, a quien se ha elogiado por defender la cuarentena más amplia, acaba de ser despedido por Jair Bolsonaro. La preocupación del presidente brasileño es no detener la economía. Argumenta que solo los ancianos y las personas con enfermedades crónicas deben ser puestos en cuarentena. El resto se consideran aptos para continuar trabajando.
Después de todo, empeorar una economía que de por sí ya estaba mal no está dentro de sus planes, ya que proyecta una reelección en el año 2022. Pero la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) defiende precisamente lo contrario: cuanto más se expande el aislamiento ahora, más rápido podrá normalizarse y avanzar la economía.
Sin embargo, considerando los miles de kilómetros de frontera con casi todas las naciones de América del Sur, la falta de acciones efectivas en Brasil puede representar un daño al trabajo de otros países en la región. Las fronteras cerradas no son muy efectivas, ya que se sabe que la entrada de extranjeros a regiones no oficiales ha sido una realidad hace mucho tiempo y más en tiempo de crisis.
En otras palabras, la falta de una amplia y consciente atención en Brasil puede socavar el esfuerzo que hacen otros estados latinos, que de por sí ha tenido un gran impacto para la economía y para toda la sociedad. Sería hora de que los presidentes de los países que puedan ser afectados exijan acciones más estrictas en países que no se preocupan por la comunidad. Entre ellos, por supuesto, Brasil.
Twitter recientemente eliminó publicaciones de Jair Bolsonaro y Nicolás Maduro con el argumento de que el contenido violaba las reglas de las redes sociales al revelar información que pone en riesgo a la población.
Mientras que el venezolano publicó una receta casera para combatir el virus, el brasileño alentó a la sociedad a salir a la calle. Sería cómico si no fuera trágico y grave que Bolsonaro lograra ser elegido generando temor en la población por el riesgo de que Brasil se convirtiera en una Venezuela. Y bueno, los dos países nunca habían tenido tanto en común como ahora.
*Periodista, magíster en Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de la Universidad Católica de Colombia