El partido de ida de la final dejó al Herediano herido de muerte pero vivo y aferrado a una esperanza que los números todavía respaldan. “El Team” tiene que ganar el sábado por dos goles de diferencia para forzar los tiempos extras, un resultado nada descabellado tomando como referencia el rendimiento de los florenses jugando como locales.
Desde que Marvin Solano asumió las riendas del club a mediados de febrero los rojiamarillos mantienen un promedio anotador de 2 goles por partido jugado en el estadio Eladio Rosabal Cordero. El Herediano es el mejor equipo jugando como local con balance de nueve triunfos, un empate y dos derrotas, con 27 goles a favor y 12 en contra. Desde que Solano tomó el equipo tras la fecha 7 el rendimiento mejoró hasta un promedio de 23 goles en 9 juegos (2,5) con apenas 8 tantos encajados.
Ganar por dos o más goles no es nuevo para los florenses ya que lo han conseguido en cinco oportunidades en esta campaña. A Belén le ganaron 3 a 1 en la fecha 9, al Santos le metieron 4 a 1 en la jornada 12, el mismo resultado a Puntarenas en la fecha 14, luego un 5 a 1 a Pérez Zeledón y un 2 a 0 a San Carlos en el cierre de la fase regular. Cualquiera de esos marcadores le servirían el sábado para como mínimo forzar los tiempos extras.