Desde niño Óscar Siezar tenía claro que su sueño era servir al país como oficial de la Fuerza Pública, por este motivo tomó la decisión de salir de su natal Upala para alcanzar esa meta.
Sin embargo, el fin de semana anterior mientras realizaba las pruebas físicas, sintió un dolor fuerte en el pecho, se trataba de un infarto, y a pesar de que recibió atención médica y fue trasladado al hospital, falleció en el centro médico horas después.
El aspirante policial emprendió un viaje hasta Liberia hace cinco años, con la intención de forjar las bases que le permitieran alcanzar su sueño, por lo que empezó a trabajar como oficial de seguridad privada.
“El sueño de él era laborar para Fuerza Pública, desde niño soñaba con eso”, comentó Victoria Bustos, tía de Siezar, muy dolida por lo acontecido.
El joven vivía con una tía y sus hermanos en Liberia donde ya se había arraigado y trabajaba para enviar recursos a su madre, con el fin de apoyarla en la crianza de dos de sus siete hermanos, menores de edad.
Siezar atendió uno de los llamados de Seguridad Pública para personas interesadas en convertirse en policías de Fuerza Pública, por lo que viajó hasta San José para realizar las pruebas respectivas, sin embargo, el destino tenía otro camino para este joven.
Personas allegadas lo describieron como un deportista, sano, así como humilde, debido a su procedencia, una familia de muy escasos recursos y con pocas posibilidades de surgir en Upala.
“Nos sorprendió la noticia porque él viajó el domingo, con tiempo para descansar y posteriormente realizar esta prueba y estar tranquilo tras tantas horas de viaje desde Guanacaste”, dijo Bustos.
A su llegada a San José decidió hospedarse en una pensión y luego se trasladó a realizar las pruebas policiales.
La llamada sobre el suceso impactó a sus familiares tanto en Upala como en Liberia, que viajaron inmediatamente hasta la capital con la intención de llegar al hospital para verlo.
“Él era un joven súper cariñoso, muy servicial y esforzado por compartir con sus hermanos y con la mamá para que se ayudaran mutuamente en la familia, por eso les ayudaba a los hermanos menores. Tenía ilusiones muy grandes”, agregó.
Seguridad Pública confirmó que atendieron una solicitud especial de la familia, la cual pidió que Siezar fuera sepultado con el uniforme de Fuerza Pública, con la intención de despedirlo con los honores correspondientes.
Además, indicaron que han estado pendientes de los gastos de la familia, así como los gastos funerarios y el traslado del cuerpo hasta Liberia.
La familia del joven asegura que era una persona muy saludable e incluso antes de las pruebas se fue hasta Upala a realizarse unos exámenes que le pedían y todo había salido en orden.
“Fue a hacerse unos estudios y todo salió bien, pruebas que le hicieron para llegar a San José, todo estaba bien. Era deportista y corría, por lo que no tenemos idea de cómo paso esto, fue un impacto muy grande”, indicó.
HONRAS
Las honras fúnebres se realizarán en Liberia tanto la vela como la misa y el funeral se llevará a cabo en la parroquia San José Obrero para luego ser trasladado al cementerio de la localidad donde habrá presencia de representantes de Seguridad Pública, según indicó la familia.