Tras el trágico accidente aéreo ocurrido en Pico Blanco, Escazú, el pasado 25 de noviembre, en el que 5 personas perdieron la vida y una sobrevivió, las autoridades han concluido el proceso inicial de investigación en el lugar.
Luis Miranda, subdirector de Aviación Civil, explicó en Extra Radio que, el levantamiento preliminar y la recopilación de componentes necesarios para la investigación ya se llevaron a cabo.
De igual forma, el levantamiento de los cuerpos por parte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) se completó.
“En caso de requerirse algo, podríamos hacer alguna consulta al dueño de la aeronave concretamente, pero lo que es el levantamiento inicial y requerido para poder iniciar ya fue, ya fue finalizado”, indicó Miranda.
Asimismo, aclaró que los restos que aún permanecen en el sitio son propiedad del dueño de la aeronave y es su responsabilidad organizar y ejecutar la logística necesaria para retirarlos, dado que ya no son necesarios para el proceso de investigación.
El subdirector también enfatizó que el acceso al lugar, aunque público, es complicado y requiere una planificación exhaustiva para el traslado de los restos.
Miranda llamó a la prudencia ante el creciente interés de visitantes “curiosos” que han convertido la zona en un “lugar turístico”.
“Dentro de todo, sí me parece un poco morboso ir al sitio de un accidente. Aconsejaría prudencia y recato, sobre todo pensando en la seguridad personal y grupal de quienes se aventuran a llegar a ese lugar”, indicó Miranda.
En este caso, cualquier intervención futura relacionada con el accidente por parte de entidades internacionales correspondería a la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de Estados Unidos, como país fabricante de la aeronave.
Sobre el caso
Un impactante video difundido en redes sociales muestra los devastadores restos de la avioneta, evidenciando la magnitud del impacto y el extraordinario hecho de que alguien pudiera sobrevivir.
El accidente aéreo en Pico Blanco ocurrió cerca del mediodía del lunes 25 de noviembre, cuando una avioneta regresaba de Barra del Tortuguero al Valle Central.
La tragedia cobró la vida del piloto Mario Miranda (40 años), la copiloto Ruth Mora (26 años) y los pasajeros Gabriela López Calleja Montealegre (64 años), Enrique Arturo Castillo Incera (56 años) y Jean Franco Segura Prendas (28 años).
El accidente marcó un giro inesperado con la milagrosa supervivencia de Paola Amador de 31 años, quien fue rescatada después de permanecer más de 12 horas atrapada entre los restos de la aeronave en una zona de difícil acceso.