Las autoridades judiciales indicaron que por medio de la autopsia se determinará lo que sucedió con un bebé de 20 días que encontraron fallecido en una vivienda en Liberia.
El primer aviso oficial lo brindó la Cruz Roja Costarricense, pues atendió un llamado por un aparente paro cardiorrespiratorio, pero al llegar al sitio encontraron ciertas evidencias que comunicaron a la Policía.
“Cuando nuestras unidades ingresaron, ubicamos a un bebé sin signos vitales, pero tiene una muestra de sangrados, con lesiones importantes a nivel de rostro, por lo que se coordina con las autoridades para el manejo final”, dijo el cruzrojista Minyar Collado.
Sin embargo, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) señaló que los agentes que llegaron a la residencia manifestaron que el menor no presentaba heridas ni otros síntomas de niño agredido. Por lo tanto, se está a la espera de la autopsia para identificar con exactitud la causa del deceso.
Trascendió extraoficialmente que el hecho ocurrió en Barrio Daniel Oduber y cuando Fuerza Pública entró a la casa el cuerpo estaba en la cama y la cara tenía un “color morado”.
Las autoridades confirmaron que lo encontraron en un cuarto distinto a donde dormía regularmente, por lo que para resguardar la escena se cerraron dos habitaciones.
Los familiares del pequeño habrían mencionado que tenía un “soplo” en el corazón y que en los próximos días iría a una cita médica en el Hospital Nacional de Niños.
La madre tendría 19 años y al parecer es el único hijo que tenía, de acuerdo con datos que habrían manejado fuentes policiales.
El PANI indicó que aparentemente no existían signos de agresión y que se debería a una complicación médica.