El guarda Marco Antonio Naranjo Arce, de 39 años, quien falleció al recibir un balazo en la cabeza por defender a una de sus hijas y esposa en Hatillo 6, San José, no solo dio la vida por ellas; pues lamentablemente este fin de semana le perdió la batalla a la muerte, sin embargo continúo dando la posibilidad de vivir a otros, pues al ser declarado muerto familiares autorizaron la donación de sus órganos.
“Tony” como le conocían en la zona, luchó en el hospital San Juan de Dios durante tres días, las condiciones en las que permanecía era diagnosticada por los doctores como muy delicada; ya que el proyectil le ingresó en la cabeza, ocasionándole lesiones graves, las posibilidades para sobrevivir eran pocas.
Parientes y demás seres queridos del hoy occiso se reunieron en el templo de Hatillo 3 donde lo velaron y seguidamente lo pasaron al cementerio. Allegados, pidieron justicia, pues según trascendió la principal sospechosa de accionar el arma permanece en libertad. Al parecer esta mujer, atentó contra la vida de la hija de 16 años de Naranjo, supuestamente mientras forcejaba y discutía con la esposa del hoy occiso, intentó meter a la fuerza a la menor dentro de su casa.
Agentes de homicidios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) continúan averiguando las verdaderos causas del atentado.