Madrid. (EFE) – El Barcelona ganó la Copa del Rey al Sevilla (2-0) en un partido agónico, con la expulsión de Javier Mascherano en la primera parte, la de Éver Banega en el minuto 90 y con un gol en el tiempo extra de Jordi Alba que, junto a otro de Neymar, selló un partido inmenso de Iniesta y Piqué, protagonistas del título que dio un doblete al cuadro azulgrana.
Los dos escribieron su nombre en la final con letras de oro. Ambos aguantaron a su equipo, que vivió en el alambre casi todo el partido por la desaparición de Mascherano que no pudo aprovechar el Sevilla. La culpa la tuvieron los dos jugadores azulgranas. Entre ambos dieron la Copa al equipo de Luis Enrique.
La final no dejó un fútbol de bandera. Esa ausencia de buen fútbol se compensó con el buen nivel de ambos equipos. Aunque el dato de los primeros 45 minutos es relevante, con solo dos tiros a puerta en todo el acto inicial, sí que hubo nivel. Sevilla y Barcelona no son cualquier cosa. Son los campeones de la Liga Europa y de la Liga, respectivamente. Eso no lo consigue un don nadie.
Tras la expulsión de Mascherano, llegó la lesión de Luis Suárez. El artífice del título de Liga desapareció del choque por un tirón muscular cuando quedaban 33 minutos. Rafinha salió al campo y, ahora sí, comenzó el acoso final sevillista. El equipo de Luis Enrique se encomendó a Gerard Piqué, inmenso toda la noche. El central despejó todo lo que llegó al área de Ter Stegen. Fue un muro de hormigón infranqueable. Él solo se bastó para sostener al Barcelona.
La solidez de Piqué desesperó al Sevilla. Los minutos fueron pasando e Iniesta, que estaba escribiendo su propia crónica estratosférica, provocó la expulsión de Banega en el minuto 90 y el partido volvió al principio, pero esta vez con un tiempo extra por delante.
El Sevilla perdió su oportunidad. Perdonó casi todo un periodo con un jugador más y lo pagó. Tardó en venirse abajo lo que tardó Messi en aparecer casi por primera vez con un pase de ensueño a Jordi Alba, que entró por la izquierda como una moto para batir a Sergio Rico a los 6 minutos de la prórroga.
El golpe fue durísimo para los hombres de Emery. Ya no se levantaron. Pudieron hasta recibir más goles, pero Sergio Rico lo evitó con varios paradones. El segundo llegó por medio de Neymar, pero fue testimonial. La Copa es de Piqué e Iniesta. La inmensidad de ambos en un choque lleno de incidentes (hasta se lesionó el árbitro) encumbró al Barcelona.
LOS MÁS GANADORES
En la historia de la Copa del Rey
Barcelona 28 títulos
Athletic de Bilbao 23
Real Madrid 19
Atlético de Madrid 10
Valencia 7
Zaragoza 6
Sevilla 5
Espanyol 4