La solicitud de una mayor apertura al diálogo realizado por la presidenta Laura Chinchilla, para los diputados de oposición así como para el sector sindical, llega “tarde”.
Según Carmen Muñoz, jefa de la fracción del PAC, a la presidenta le cogió tarde, ya que al gobierno le quedan 12 meses para cumplir las metas.
“El diálogo ha estado ausente en las negociaciones. La presidenta sufrió efectos retardados, al reaccionar la casa estaba en llamas”, aseguró Muñoz.
Danilo Cubero, jefe de la Fracción del Movimiento Libertario, señaló que la solicitud presidencial “es un buen indicador”.
“Nunca es tarde cuando la dicha es buena. No interesa las tardecitas de café, queremos ver acciones concretas en proyectos de ley”, aseguró el libertario.
Para los sindicalistas ese llamado, realizado en el discurso del primero de mayo, fue público por lo que la presidenta tendrá que cumplir en los próximos 12 meses.