Los diputados de oposición anuncian que revisarán con lupa la propuesta de ajuste fiscal que el gobierno negoció con autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI), acuerdo técnico alcanzado este viernes.
El objetivo es tener acceso a un crédito por $1750 millones que se daría en tres años, a cambio el país propuso una serie de medidas que le permitan llegar a un superávit primario del 1% del Producto Interno Bruto (PIB) para el 2023.
El superávit primario se logra cuando los ingresos del Gobierno central son superiores a los gastos, pero dejando por fuera los recursos del pago de intereses de la deuda pública.
Los legisladores insistieron en sus primeras reacciones que la propuesta carece de medidas urgentes para la reactivación económica y que lo propuesta en reducción del gasto es poco.
Por el lado del ingreso se incluyen seis proyectos de ley que son clave, donde la reforma al empleo público se mira como la más compleja de aprobar.
Para “facilitar” ese acuerdo con las fracciones de oposición, el ministro de Hacienda Elián Villegas indicó que no se incluye en la propuesta cambios al impuesto de Valor Agregado (IVA), ni gravar las transacciones bancarias, ni modificación al impuesto de bienes inmuebles o a las pensiones complementarias ni privatización de instituciones públicas.
El FMI espera que el Congreso apruebe el crédito negociado entre mayo y junio próximo.